Cancún.- A ocho días del inicio de las intensas lluvias cerraron vialidades, dañaron casas y cultivos y obligaron a evacuar comunidades, y a cinco días de que se decretara una Declaratoria de Emergencia, ciudadanos en el centro y sur del estado todavía esperan la ayuda del Gobierno Federal.
De forma atípica, un sistema tropical que ingresó a Centroamérica desde el Pacífico, avanzó como un remanente hacia Campeche, para reemerger como depresión tropical “Cristobal”, trayendo consigo no solamente tres días de intensas lluvias y vientos para toda la entidad, sino escurrimientos considerables de agua desde el vecino estado, inundando e incomunicando múltiples comunidades.
Gran parte de la zona limítrofe con Campeche, en Bacalar y José María Morelos sufireron fuertes anegaciones que bloquearon caminos. Una comunidad tuvo que ser evacuada por aire, en tanto que otra debió recibir suministros a través de vehículos de gran tamaño. Campesinos en varios ejidos aseguraron haber perdido sus cosechas, o los pastizales para su ganado.
Con base en el estudio de los daños efectuado por personal de Protección Civil, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana determinó decretar una Declaratoria de Emergencia para cuatro municipios de Quintana Roo, por estas lluvias.
“Por lluvia severa el 3 de junio e inundación pluvial del 3 junio al 5 de junio del presente año, en el municipio de Bacalar y lluvia severa el 4 de junio e inundación pluvial del 3 al 5 de junio del año en curso para el municipio de Felipe Carrillo Puerto y José María Morelos, inundación pluvial del 3 al 5 de junio del 2020 para el municipio de Othón P. Blanco”, se detalló en el comunicado.
Este decreto significa que se activan los recursos del Fondo para la Atención de Emergencias (FONDEN); o al menos, eso es lo que en teoría debió ocurrir.
La realidad es que a cinco días de ese comunicado, no existe tal decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación, y hasta la fecha, no hay recursos materiales o humanos por parte de la Federación para atender a la población damnificada o desplazada por estos escurrimientos.
“A partir de esta Declaratoria, solicitada por el gobierno estatal, las autoridades contarán con recursos para atender las necesidades alimenticias, de abrigo y salud de la población afectada”, declaró la SPPC, dándolo como un hecho, cuando hasta ahora solo son buenas intenciones, sin atenderse ninguna de las necesidades mencionadas, las que han tenido que ser resueltas hasta ahora exclusivamente por el Gobierno del Estado.
Es de destacar que recién ayer figura en el Diario Oficial de la Federación (DOF), la declaratoria de emergencia para dos municipios de Chiapas, por lluvias ocurridas en mayo, lo que pudiera indicar que no se tiene una oportuna respuesta de las autoridades federales, por lentitud o ineficiencia burocrática.
Queda por verse cuánto tiempo más pasará hasta que el Gobierno Federal cumpla lo que aseguró hace cinco días, o si todo quedará en solo discurso.
