José María Morelos.- Una madre de familia que salió a hacer compras dejó a su hijo en su vivienda durante un momento. En ese instante el menor se puso a jugar con cerillos. Un descuido originó que incendiara su vivienda, la que gracias a la intervención de vecinos y a que los Bomberos están cerca de la zona se evitó que se quemara por completo.
Los hechos ocurrieron en la colonia San Juan, en la calle Santiago Pacheco con Tihosuco astas donde primeramente llegaron los vecinos una vez que vieron cómo empezaba a salir fuego de la vivienda. El techo de la palada comenzó a incendiarse mientras los vecinos pusieron. salvo al menor y comenzaron a sacar las posesiones de la familia.
Por fortuna, la estación de Bomberos se encuentra a la vuelta de esta casa de paja, por lo que también la actuación a tiempo fue vital para que el fuego no consumiera por completo la propiedad.
Finalmente, y más allá del susto la familia tendrá que rehacer el techo de su palapa, pero se evitó una tragedia mayor.
Incidentes como el anterior hacen recordar la importancia de enseñarle a los pequeños el riesgo que conlleva juega con fuego y/o cerillos.
