Mundo.- Beber agua embotellada genera un impacto ambiental 1400 veces mayor que si se bebiese directamente del grifo. Lo anterior se atribuyó al elevado consumo de materiales y energía para su producción, señalan científicos españoles en su estudio cuyo objetivo fue medir el impacto en la salud y el ecosistema.

Según un estudio de Science of the Total Environment, a nivel mundial, el consumo de agua embotellada aumentó considerablemente en los últimos años un fenómeno que responde a la falta de acceso al líquido, la contaminación de las fuentes naturales o la creencia de que la embotellada es de mejor calidad.

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El estudio se concentró en comparar los impactos del consumo de agua embotellada en Barcelona, España, en comparación con el agua filtrada del grifo o beberla directamente de la llave.

Los impactos ambientales y en la salud fueron evaluados de manera independiente, por lo que desarrollaron una metodología que combinó elementos de un enfoque conocido como análisis del ciclo de vida, útil para medir las consecuencias en el ecosistema.

Y resultó que si todos los habitantes de Barcelona, estimada en 2020 en 1.6 millones, tomará agua embotellada, causaría la pérdida de 1.43 especies anualmente y tendría un costo de producción de 83.9 millones de dólares. En conclusión, 1400 veces superior en comparación con las otras dos opciones.

“Nuestros resultados demuestran que teniendo en cuenta tanto los efectos medioambientales como los sanitarios, el agua de grifo es una mejor opción que el agua embotellada, ya que esta genera una mayor cantidad de impactos”, resumen los autores en la publicación.

Además aseguran que aunque el agua de grifo contiene sustancias químicas asociadas al cáncer de vejiga, estas se encuentran en concentraciones mínimas que no representan una amenaza significativa para la población.

Con información: Plumas Atómicas