Guerrero.- Jefferson Rodríguez, un joven de 21 años que viajaba con la primera caravana migrante, decidió abandonarla y quedarse en Chilpancingo, Guerrero, para estudiar derecho.
Jefferson, formaba parte de la primera caravana que salió el 13 de octubre pasado de San Pedro Sula, Honduras. El hondureño dijo que lo único que pide es una oportunidad para trabajar, pues de llegar a los Estados Unidos, de igual manera sería una persona indocumentada.
Me separé porque al llegar a EE.UU. también sería ilegal, y si aquí te brindan apoyo y te ayudan a conseguir papeles para trabajar duro, aquí le podemos echar ganas”, afirmó.
También comentó que hacer activismo político en su país es un riesgo inminente, pues si la gente se “revela” los matan, por lo que no hay organizaciones o grupos que apoyen la causa.
“Allá la gente, cuando se desaparece alguien, solo se quedan callados, allá no forman grupos así, ni organizaciones para nada. Allá mejor te quedas callado o te desaparecen”, recalcó.
Agregó, que sus connacionales emigraron por necesidad:
“En mi país todo está mal, está muy cabrón, y los que estamos migrando es porque tenemos la gran necesidad, por eso emigró tanta gente”, explicó Rodríguez a varios medios mexicanos.
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El Joven de 21 años, decidió abandonar el “sueño americano”, luego de conocer a representantes del Centro de Derechos Humanos Minerva Bello, quienes lo están apoyando con los trámites para que pueda quedarse en Guerrero como refugiado para estudiar Derecho. “Espero estudiar leyes y trabajar”. Espero que me acepten, así como me están apoyando”, concluyó.
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