James y Kelly McGraw son una pareja común como cualquier otra, con la única peculiaridad que les gusta jugarse bromas el uno al otro.

Esta vez fue James quién decidió bromear a su esposa al tatuarse en el muslo su rostro, teniendo como referencia una fotografía en la que Kelly aparece dormida en un avión y con la boca abierta.

De acuerdo a medios locales, Kelly le cortó mal el pelo a su esposo con anterioridad, por lo que esta fue la venganza de James.

Como parte de los regalos navideños, él le mostró su nuevo tatuaje, que ella no podía creer.

Según contó, la primera vez que lo vio “estaba horrorizada. No lo podía creer. Odiaba mucho la foto”.

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Sin embargo, tras superar la broma, ahora indica que “No puedo mirarlo sin echarme a reír. Es horrible y tengo más papada”, dijo a un periódico local.

Ahora es James quien tiene miedo tras realizarse el tatuaje, pues después de 24 años de hacerse bromas, sabe que la venganza de Kelly será tan épica como su broma más reciente. “Tengo miedo porque no sé qué está planeando ahora”, confesó.