Cancún.- Para los pocos comerciantes que se instalaron en inmediaciones de la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe de la Supermanzana 63, fue una “tristeza lo que ocurrió” este año al vender apenas el 5% de lo que normalmente comercializan en los festejos a la Morenita del Tepeyac.

Únicamente se colocaron siete comerciantes, cinco de ellos dedicados a la venta de flores, cuatro de artículos religiosos y dos de playeras.

“Estuvo más o menos, es una tristeza, no como en los otros años. Nosotros llevamos 20 años en este ambiente y la verdad es muy triste, otros años atrás”, lamentó Eber Maciel, vendedor de flores.

Los festejos a la Virgen de Guadalupe concluyen esta noche de manera inédita, como nunca antes desde que se tiene registro, derivado de la contingencia sanitaria por el COVID-19 y en medio de un aumento en el número de casos positivos a nivel general.