Cancún.– Una circunstancia casi universal en el año que dejamos atrás es que todos sufrieron en alguna medida a causa de la crisis económica provocada por la pandemia del COVID-19. Esto excluso, sorpresivamente, a Carlos Díaz Ascensio, creador de sombreros pintados, quien dice que ahora le va mejor que antes.
En entrevista, el artesano señaló que aunque pinta a mano diversos diseños en sombreros que pone a la venta, fue solo hasta el año pasado que “se pusieron de moda”, al grado que ahora surte a distintos mercados, hoteles y hasta tianguis.
Los sombreros los compra ya hechos, pero el se dedica a pintarlos con flores, mandalas, animales o distintos diseños coloridos, al ritmo de 10 por día, para venderlos a 200 pesos cada uno.
“En algunos les pongo luz fosforescente, para que brillen en lugares con ‘luz negra’ como antros, o en lugares oscuros, como el cine”, explicó el artesano.
También te puede interesar: Vuelven artesanos a ofrecer sus productos en la Ventana al Mar de Puerto Morelos
Por mucho tiempo, sufría para sacar sus gastos, pero últimamente ya se la pasa ocupado, entregando pedidos de mayoreo para hoteles, los mercados de artesanía o para comerciantes tianguistas.