Cancún, MX.- Desde septiembre de 2019 a la fecha, la clínica clandestina “Biomedi-Clínica Cancún” ha seguido operando, a pesar de que autoridades del Ayuntamiento de Benito Juárez ha ido en varias ocasiones a poner sellos de clausura.

La clínica, que no tiene uso de suelo comercial, se ubica en la calle Calcetoc, en el Fraccionamiento Lomas de Virreyes en la Supermanzana 50.

Desde su apertura, los vecinos han lidiado con los administradores del lugar porque actúan de manera irregular, además que la zona es habitacional y no comercial.

Han presentado diversos escritos ante las autoridades correspondientes.

De acuerdo con Enrique Ramos García, representante de las 20 familias afectadas, la Unidad de Vinculación, Transparencia y Acceso a la Información Pública (UVTAIP) confirmó que no había ningún registro de la clínica, ni se había otorgado el cambio a uso de suelo comercial.

“Queremos que la autoridad haga lo suyo, que intervenga y clausure como debe de ser”.

Aunque se han puesto sellos de clausura en diversas ocasiones, los administradores quitan dichos sellos y vuelven a operar.

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La última clausura fue el 17 de enero de 2022 por parte de la Dirección de Fiscalización Municipal. No obstante, hace algunos días, los encargados volvieron a romper los sellos.

“Por razones que no entendemos la autoridad no realiza lo que corresponde, no ha actuado realizando su labor (que es) clausurar definitivamente el negocio”.

“Y que vigile que las clausuras sigan, en vez de que esta gente venga, arranque, o sea, con toda impunidad a lo que ya se logra y que la autoridad puso, porque finalmente la autoridad nos dio la razón”.

En palabras de Ramos García, temen que la autoridad esté coludida con el establecimiento, pues cada vez que ponen sellos, acude el personal de seguridad de Biomedi-Clínica Cancún.

En la última clausura, dos vecinas tuvieron que mostrarle al funcionario de la Dirección de Fiscalización Municipal cuál es la dirección, “puesto que le dieron equivocadamente un lote que no es el de la clínica clandestina, lo mandaron a un lote baldío. Nos hace pensar que eso fue a propósito”.

Enrique Ramos dijo que tres vecinos interpusieron una denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE) de Quintana Roo en contra de Iván Rivera Morales, representante legal de Biomedi-Clínica Cancún; María Robles García, administradora del lugar; y José Robles Hernández, encargado de seguridad, por amenazas, agresiones y acoso.

“Tenemos videos en la cual se ve, pues la actividad de la clínica clandestina, él (Iván Rivera Morales) a su vez agrediéndome”.

“Hay otro video en la cual agreden a mi esposa, le tiran la basura en la cara (…) Vinieron aquí realmente a perturbar nuestra paz, nuestra tranquilidad, a violentar nuestros derechos”.

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