La cascada es 2 metros más alta que la Torre Reforma de la Ciudad de México, y ahora está en riesgo por la dura sequía que enfrenta nuestro país.
La fuerte sequía en México ha afectado grandes extensiones de nuestro territorio y sus regiones naturales, por lo que sus principales atractivos turísticos lo han resentido, como la majestuosa Cascada de Basaseachi en el oeste serrano de Chihuahua.
La Cascada de Basaseachi es una cascada de que mide 246 metros desde su nacimiento con los arroyos Durazno y Basaseachi, de hecho es la más alta de México.
Y es que autoridades locales reportan que las pocas lluvias que han caído en el estado norteño han desaparecido el cauce de los arroyos tributarios.
Por su parte, las autoridades del municipio de Ocampo niegan que las afectaciones tengan relación con otro tema diferente a la pertinaz sequía que enfrenta esta joya de la Sierra Madre Occidental.
Aunque los pobladores aseguran que es debido a la operación de dos minas en la Sierra Tarahumara de Chihuahua, Mina Concheño y Pinos altos, las cuales han desviado el cause natural del Río para abastecerse de agua.
Imágenes difundidas por redes sociales que exponen la barranca sin la singular caída de agua han cobrado notoriedad. Los residentes locales están preocupados por la falta de agua y que esto pueda afectar las actividades económicas y sociales de este destino turístico.

Cascada de Basaseachi
Respecto a este atractivo turístico, la leyenda de este lugar en tierra rarámuri relata que esta cascada lleva el nombre de Basaseachi, la hija del rey Candameña , quien regía esa zona antes de que aparecieran los conquistadores españoles.
Se dice que el mito cuenta que tras la muerte de todos sus pretendientes, Basaseachi saltó por el barranco y un brujo transformó su caída en esta impresionante cascada.
Con información de El Diario