Argentina.- En un colegio de Santa Cruz, un niño de 10 años fue avistado por una profesora repartiendo dinero entre sus compañeros, lo cual llamó la atención, pues hicieron fila en el colegio para comprar gasolina.
La plata que tenía el menor era de los ahorros de sus padres, de acuerdo con el canal local TN, el menor había buscado el dinero y lo sacó para repartirlo.
Una profesora se percató de lo que estaba pasando y pensó que se trataba de un caso de Bullying, pero no fue así.
Los alumnos tenían mucho dinero, con compras de hasta 3 mil pesos, lo cual trajo sospechas, la docente alertó a las autoridades.
En consecuencia, las autoridades llamaron a la familia del niño para que asistiera al colegio y darle a conocer la situación.
La madre desconoció que el menor manejara tanto dinero, lo cual la alertó, por lo que entrevistaron al estudiante.
Ahí fue cuando se enteraron que nadie lo obligó a entregar dinero, sino que él tomó ese dinero para darlo, parte de este se pudo recuperar.
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Sin embargo, un gran porcentaje ya había sido gastado, por lo que esta historia dejará a los padres en alerta con el dinero en casa.
Y es que no han sido los primeros casos de travesuras en niños, se han conocido historias de menores que han comprado cosas por Internet o comida por delivery.
Una niña, por ejemplo, en Estados Unidos, compró una actualización para un auto Tesla que costó 10 mil dólares, cuando la madre se enteró, lo primero que hizo fue intentar cancelar el pedido, pero ya era demasiado tarde.
También otra niña tomó el teléfono de su madre, se metió en WalMart y compró cientos de sillas para hogar, los padres luego no hallaban que hacer con el pedido, por suerte pudieron devolverlo.