México.-Este 2 de febrero, se celebra en México el Día de la Candelaria, un festejo católico en el cual los tamales son casi protagonistas, pues muchas personas acostumbran comerlos como tradición, así es que hablaremos un poco sobre ellos.
La tradición de los tamales, arraigada en la historia culinaria de México desde tiempos prehispánicos, es mucho más que un platillo; es un símbolo de identidad y sabor que perdura en el paladar de los mexicanos.
Mucho maíz
Según datos proporcionados por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, un mexicano promedio consume alrededor de 335 kg de maíz al año, y entre los platillos favoritos elaborados con este grano ancestral se destacan los tamales.
Originarios de épocas antiguas, los tamales eran no solo una delicia culinaria, sino también un tributo a la fertilidad de la tierra y una ofrenda a los ancestros en eventos sociales y ceremonias. Los tamales prehispánicos solían ser firmes y apelmazados, elaborados con ingredientes como calabaza, chile y maíz, productos emblemáticos de la tierra mexicana.
Una curiosidad histórica es que el dicho popular “dar atole con el dedo” tiene sus raíces en la época azteca, cuando, ante la sequía, se ofrecía atole y tamales como gesto de alivio y esperanza.
Evolución
Con la llegada de los españoles, los tamales evolucionaron, integrando ingredientes y técnicas culinarias europeas. La incorporación de elementos como la manteca y la carne de cerdo enriqueció el sabor y la variedad de este manjar, que hoy se encuentra en una amplia gama de sabores y rellenos, desde los clásicos de carne hasta los más sofisticados de piña con rompope.

La producción de tamales depende en gran medida de la abundante cosecha de maíz en México. Con una producción anual que supera las 27 millones de toneladas, el maíz encuentra en estados como Sinaloa, Jalisco y Michoacán sus principales bastiones productivos. El ciclo de producción, concentrado entre noviembre y enero, representa cerca del 60% de la producción total, seguido por un segundo periodo entre mayo y julio.
También te puede interesar:Tercer Festival Gastronómico del Caribe Mexicano será en Puerto Morelos el 24 y 25 de febrero
México, reconocido como el octavo productor mundial de maíz, conserva una diversidad única en sus razas de maíz, con un total de 64 variedades. Esta riqueza agrícola no solo sustenta la tradición de los tamales, sino que también enriquece la mesa y el patrimonio gastronómico de la nación.
En un país donde cada familia guarda su receta única, se estima que existen alrededor de 500 variantes de tamales, que se desdoblan en unas 3 mil o 4 mil preparaciones, reflejando la diversidad cultural y el ingenio culinario que caracterizan a México.