Elementos de la Guardia Nacional (GN) aseguraron 12 kilos de una sustancia con las características de la droga sintética cristal en el estado de Querétaro.
La operación tuvo lugar en una empresa de mensajería y paquetería situada en el municipio de Colón. Los guardias seleccionaron al azar diversos envíos y, con la ayuda de un ejemplar canino, detectaron dos cajas de cartón que presentaban irregularidades.
Ante la señal del can, los guardias nacionales llevaron los paquetes sospechosos a una máquina de rayos X, donde confirmaron que había material de densidad irregular.
Los envíos, que tenían como destino Texas, Estados Unidos, contenían latas de metal etiquetadas como salsa para pizzas. Dentro de las latas se encontraron bolsas cerradas al alto vacío con una sustancia granulada y transparente, presumiblemente cristal. En total, el peso de la droga asegurada fue de aproximadamente 12 kilos.
El decomiso se enmarca dentro de las Estrategias Nacionales de Seguridad Pública y de Prevención de Adicciones. Tanto la sustancia como las evidencias fueron puestas a disposición del Ministerio Público de la Federación, entidad responsable de continuar con las investigaciones pertinentes.

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Droga cristal incautada en Querétaro
La droga sintética cristal, también conocida como metanfetamina cristalina o “cristal meth,” es una potente sustancia estimulante del sistema nervioso central. Se presenta en forma de cristales transparentes o azules y puede ser ingerida, inhalada, fumada o inyectada.
Esta droga provoca un aumento rápido y prolongado de la energía y la euforia, pero también tiene efectos adversos significativos como pérdida de apetito, insomnio, paranoia, alucinaciones y un alto riesgo de adicción.
Su uso prolongado puede causar daños severos a la salud física y mental, incluyendo problemas cardiovasculares, daño cerebral y deterioro dental.
Su producción ha aumentado significativamente en México en los últimos años. Según la Administración para el Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos y la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) de México, se han decomisado récords históricos de laboratorios clandestinos, principalmente en los estados de Sinaloa, Michoacán, Jalisco y Baja California.