Un trágico suceso conmocionó al poblado de Zapiguri, en el municipio de Tepehuanes, Durango, luego de que un adolescente de 14 años le quitara la vida a su abuelo y dejara gravemente herida a su abuela.
De acuerdo con reportes, el joven habría discutido con sus abuelos, quienes intentaron aconsejarlo. En un ataque de ira, el menor ingresó al cuarto de sus abuelos durante la madrugada y disparó en múltiples ocasiones contra ellos. Marcelino Cano, de 62 años, falleció en el lugar a causa de los impactos de bala, mientras que Leovarda resultó gravemente herida.
Tras cometer el crimen, el adolescente huyó hacia la sierra. Sin embargo, las autoridades lograron aprehenderlo y lo pusieron a disposición de las autoridades correspondientes.
El padre del menor confirmó que había existido una discusión previa entre el adolescente y sus padres, lo cual pudo haber desencadenado la tragedia.
La fiscal de Durango, Sonia Yadira de la Garza, informó que, debido a la edad del menor, las sanciones a las que se hará acreedor serán distintas a las que se aplicarían a un adulto. Se buscará su reinserción social y evitar que vuelva a cometer actos delictivos.
“Es un tipo de delito que pudiera tener establecidas cierto tipo de pena privativa de la libertad, pero jamás va a poder ser sancionado en la misma magnitud que un adulto, lo que se busca es su restablecimiento a la sociedad y la no repetición de estos hechos”.
Este lamentable suceso ha generado gran consternación en la comunidad y ha puesto en el centro del debate la problemática de la violencia juvenil y la importancia de atender las causas que la originan.
“Se trabajará en conjunto con la secretaría de Seguridad Pública, el Centro de Reinserción y Tratamiento para Menores Infractores y el Tribunal de Justicia para Adolescentes”, dijo la fiscal para Telediario.
La violencia intrafamiliar es un problema complejo que afecta a muchas familias en todo el mundo. Uno de los aspectos más sorprendentes y preocupantes de esta problemática es cuando los adolescentes ejercen violencia física o psicológica hacia sus abuelos.
Las causas de este tipo de violencia son múltiples y suelen ser el resultado de una combinación de factores:
Problemas de salud mental: Trastornos como la depresión, la ansiedad o los trastornos de conducta pueden llevar a comportamientos agresivos.
Influencia de grupos o pandillas: La presión de grupo y la búsqueda de aceptación pueden llevar a los adolescentes a cometer actos violentos.
Consumo de drogas o alcohol: Estas sustancias pueden alterar el juicio y aumentar la impulsividad.
Conflictos familiares: Problemas no resueltos dentro de la familia, como divorcios, separaciones o maltratos, pueden generar tensiones y resentimientos.
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Falta de límites y disciplina: Una crianza permisiva o, por el contrario, demasiado rígida, puede contribuir a la aparición de problemas de conducta.
Las consecuencias de la violencia hacia los abuelos pueden ser devastadoras tanto para las víctimas como para los agresores. Los abuelos pueden sufrir lesiones físicas, trastornos emocionales y un deterioro significativo de su calidad de vida. Por su parte, los adolescentes que ejercen violencia suelen tener dificultades para establecer relaciones saludables en el futuro y pueden enfrentar problemas legales.
Con información de Milenio