Una niña de 11 años de edad se suicidó en Texas tras varios meses de bullying escolar en el que sus compañeros la amenazaban con llamar al Servicio de Migración y Control de Aduanas (ICE) para deportar a su familia.
Jocelynn Rojo Carranza atentó contra su vida el 3 de febrero pasado. Paramédicos lograron reanimarla y la trasladaron a un hospital en Dallas, donde tras cinco días fue declarada con muerte cerebral.
Marbella, madre de la menor, acusó que la Secundaria de Gainesville en Texas, donde estudiaba la menor el sexto grado, le notificó del bullying contra su hija hasta que esta murió.
En entrevista para Univision la madre de familia detalló que según la escuela Jocelynn acudía una o dos veces por semana a la Consejería Escolar para denunciar que sus compañeros la molestaban por su origen hispano.
Al parecer, la amenazaban con llamar a Migración para que deportaran a sus padres y ella se quedara sola en Estados Unidos.
“La escuela estaba al tanto de eso pero a mí nunca me hicieron saber lo que estaba pasando con mi hija… fue negligencia de la escuela no haberme mantenido al tanto”, denunció Marbella.
La Secundaria de Gainesvilledeportaciones masivas emitió un comunicado para informar la muerte de un miembro de la comunidad escolar.
Sin mencionar a Jocelynn la escuela refirió que el hecho podría afectar a los alumnos, por lo que pidió a los padres de familia, maestros y consejeros estar atentos a los menores y escucharlos.
La Policía de Gainesville en Texas refirió por su parte estar investigando el incidente.
Jocelynn Rojo tendrá una misa este miércoles para su posterior funeral en el cementerio Fairview.
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Crisis en refugios para migrantes de Texas
La red de refugios para migrantes en Texas, que en años anteriores atendía a cientos de personas diariamente, se encuentra al borde del colapso debido a la drástica reducción en el número de solicitantes de asilo que cruzan la frontera.
Esta situación se intensificó desde que las políticas implementadas por la administración de Donald Trump limitaron severamente el acceso al asilo en enero, dejando a muchos refugios casi vacíos y a otros en riesgo de cerrar sus puertas.
El Centro de Respiro de McAllen, operado por Caridades Católicas del Valle del Río Grande, experimentó una caída significativa en el número de personas que recibe.
Mientras que en enero atendieron a 3.188 migrantes, en lo que va de febrero el promedio diario fue de menos de 12 personas, lo que proyecta un total mensual inferior a 350 en Texas. Esta cifra contrasta con los casi mil migrantes diarios que llegaban a los refugios en el punto álgido de las llegadas hace unos años.
Con información de Univision.