En una decisión que evidencia el impacto de las últimas políticas comerciales internacionales en la industria automotriz, el gigante surcoreano Hyundai Motor anunció que creará un equipo especial dedicado a analizar y responder a los aranceles impuestos por Estados Unidos.
Como una medida inicial y de alto impacto, la compañía comenzó a trasladar la manufactura de algunos de sus populares vehículos crossover Tucson desde México hacia territorio estadounidense.
Esta decisión se produce en un contexto de mayores gravámenes sobre bienes importados a Estados Unidos, lo que obliga a los fabricantes de automóviles con grandes cadenas de suministro transfronterizas a reconsiderar sus estrategias de producción y distribución.
La noticia coincide con la publicación de los resultados financieros del primer trimestre de Hyundai, que revelaron un modesto aumento del 2% en sus ganancias operativas, impulsado en parte por la debilidad del won surcoreano
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Respuesta de Hyundai a los aranceles de Trump impacta en México
La idea de Hyundai de crear un equipo de trabajo interno para abordar específicamente el tema de los aranceles estadounidenses pone de manifiesto la seriedad con la que la empresa está tomando el impacto de estas políticas.
La transferencia de la producción del Tucson desde México hacia Estados Unidos es una demostración de esta respuesta.
Hay que recordar que se impusieron aranceles del 25% a los productos importados desde México y Canadá.
Estas tarifas afectan directamente a los vehículos construidos en el extranjero, así como a las piezas importadas de estos países para ser utilizadas en el ensamblaje de vehículos en Estados Unidos.
La responsabilidad del pago de estos aranceles recae en el importador, quien puede optar por absorber el costo o trasladarlo a los consumidores a través de precios más elevados.
La decisión de Hyundai no es aislada. Otras automotrices con una fuerte presencia de manufactura en México, como Honda, Kia, Mazda, Nissan y Volkswagen, también analizan qué harán a partir de los cambios en las políticas arancelarias.
Volkswagen, por ejemplo, opera la planta automotriz más grande de México, y aproximadamente el 80% de los vehículos Honda producidos en México tienen como destino el mercado estadounidense.
Aunque hubo informes de medios de comunicación de Japón que hablaban de la salida de Honda de México, las dudas se despejaron.
A pesar de los rumores y reportes internacionales, la realidad parece ser distinta: Honda no se va de México.
Con información de Reuters.