Sigue la inseguridad en Cancún, donde hace unas horas fue levantado un turista originario de Colombia que vacaciona en el destino. El hombre de 44 años de edad se encontraba en el antro Mandala de la Zona Hotelera, donde fue raptado por unos sujetos.
La víctima fue localizada horas después en la zona de Bonfil. Presentaba lesiones de consideración, incluida la amputación de una de sus orejas. Presuntamente fue víctima de robo, le quitaron dinero y algunas de sus pertenencias.
De acuerdo con lo reportado por la propía víctima, de nombre Jaime L. V. I., de 44 años de edad, y originario de Colombia, salió cerca de las 3:30 am de Mandala, en la Zona Hotelera de Cancún. Quiso buscar un taxi para volver a donde se alojaba: The Pyramid de Oasis, cuando fue interceptado por unos sujetos.
Estos hombres lo subieron a un vehículo, posteriormente lo trasladaron a un domicilio, donde fue golpeado por estas personas, quienes lo despojaron presuntamente de dinero y pertenencias.
Tras ser agredido y robado, este hombre originario de Colombia fue dejado en una zanja en la zona de Bonfil, de la cual logró salir tiempo después. Cuando intentaba cruzar la carretera fue observado por elementos de la Policía de Cancún a bordo de la unidad 5694, cerca del mediodia de este lunes 29 de septiembre.
Al notar que el hombre presentaba signos de violencia, los uniformados solicitaron la presencia de paramédicos, quienes lo valoraron y lo llevaron a un hospital. Al parecer presenta hematomas, contusiones, además de la ausencia de la oreja izquierda, así como heridas en ambas manos.
Hasta el momento se desconoce el móvil de la agresión, aunque según lo dicho por la víctima, y dado que es un turista, podría deberse a un robo. Aunque hay que recordar que en los últimos meses ha habido incidentes con personas de Colombia, sobre todo de los prestamistas conocidos como “Gota a Gota”. Un par de ellos ha sido ejecutado.
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También hay casos en los que personas de Colombia, principalmente mujeres han caído en las redes de trata y prostitución. Algunas han sido liberadas y regresadas a su país.
Y a estos casos hay que sumar los abusos de los agentes de Migración contra colombianos, a quienes incluso les niegan la entrada a Cancún, pese a que cuentan con toda su documentación y reservaciones.