Las lluvias del tifón Kalmaegi dejaron al menos 40 personas muertas y miles quedaron desplazadas debido a las inundaciones causadas en el centro de Filipinas.
Las precipitaciones afectaron gravemente la isla de Cebú, donde pueblos enteros quedaron bajo el agua.
En videos se observa cómo autos, camiones y contenedores de transporte fueron arrastrados por las fuertes corrientes en Filipinas.
En las 24 horas previas a la llegada del tifón, la zona alrededor de la capital provincial, Ciudad de Cebú, recibió 183 milímetros de lluvia, una cifra muy superior al promedio mensual de 131 milímetros.
“La situación en Cebú no tiene precedentes”, afirmó la gobernadora provincial Pamela Baricuatro en un mensaje publicado en Facebook. “Esperábamos que los vientos fueran lo peligroso, pero es el agua lo que realmente pone en riesgo a nuestra gente”, señaló. “Las aguas son devastadoras”, agregó.
Solo en Cebú, se confirmó la muerte de 21 personas, dijo el subadministrador de defensa civil, Rafaelito Alejandro, que da el número actual de muertos por la tormenta en 26 en Filipinas.
“Según la información que tenemos, la mayoría de ellos murieron ahogados”, dijo.
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Las muertes en otras provincias incluyeron a un residente anciano que se ahogó en un piso superior de su casa en la provincia de Leyte y un hombre golpeado por la caída de un árbol en Bohol en Filipinas.
Don del Rosario, de 28 años, relató que debió refugiarse junto a sus vecinos en los techos y partes altas de las casas para escapar del agua. “El agua subió muy rápido. De lo que me dijeron, la inundación comenzó alrededor de las 03H00. Para las 04H00 ya estaba descontrolado, la gente no podía salir de sus casas”, dijo.
Las autoridades locales informaron que miles de familias fueron evacuadas a albergues temporales en escuelas y centros comunitarios, mientras que los servicios de electricidad y transporte permanecen interrumpidos en varios municipios.
La situación se agrava porque cientos de personas aún vivían en carpas luego del terremoto de magnitud 6.9 que golpeó Cebú a finales de septiembre. Los equipos de emergencia enfrentan dificultades para acceder a las zonas más afectadas, debido al colapso de varios puentes y carreteras en Filipinas.
Con información de AFP.
