Este jueves, campesinos y transportistas anunciaron que el próximo lunes 24 de noviembre llevarán a cabo un mega bloqueo y paro nacional en carreteras, aduanas y sectores productivos del país. El movimiento, encabezado por el Frente Nacional para el Rescate del Campo Mexicano (FNRCM) y la Asociación Nacional de Transportistas (ANTAC), exigen soluciones a los problemas de inseguridad, extorsiones y falta de atención del gobierno federal.
De acuerdo con ambas agrupaciones, desde hace meses han denunciado un deterioro generalizado en las condiciones de trabajo, así como un abandono institucional que afecta tanto a productores agrícolas como al sector del transporte. A pesar de existir mesas de diálogo con legisladores, aseguraron que no han obtenido respuestas ni avances concretos a sus demandas.
Entre las principales exigencias se encuentra la atención urgente a la inseguridad y las extorsiones que padecen los 32 estados del país. También reclamaron la falta de documentos esenciales que la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) no ha entregado, como licencias plastificadas, papeletas para inspecciones físico-mecánicas, verificaciones vehiculares y placas para unidades recién emplacadas.
Los líderes campesinos, por su parte, señalaron que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) no ha destinado recursos suficientes para atender las necesidades del campo. Sostuvieron que el Estado debe asumir su papel como rector en la producción, comercialización y transporte de alimentos, garantizando condiciones dignas para quienes sostienen estos sectores.
Transportistas y campesinos sugieren no salir de casa
Por su parte, David Esteves Gamboa, representante de los transportistas, exhortó a operadores y empresas a no circular ese día y suspender actividades por completo.
“Les pedimos en este momento a toda la ciudadanía, a todos los mexicanos que no salgan ese día, principalmente a los operadores, a todos los transportistas del país para que no saquemos un solo viaje”, declaró.
También, Esteves Gamboa negó las versiones de algunos medios de comunicación, que señalaron que el movimiento reciba financiamiento externo. Según el transportista, cada participante costea sus propios gastos.
“No nos está financiando nadie. Yo al menos vengo con mi propio recurso”, setenció.
Por su parte, Baltazar Valdés, dirigente campesino, confirmó la alianza con el sector transporte y aseguró que ambas fuerzas marcharán juntas hasta lograr respuestas. Explicó que la movilización abarcará bloqueos carreteros, cierre de la industria y la interrupción de operaciones en aduanas de la frontera norte, lo que podría impactar significativamente la actividad económica.
Otro vocero del movimiento, identificado como Yacu, aclaró que la protesta no tiene la intención de confrontar al gobierno ni está ligada a partidos políticos. Indicó que su objetivo central es exigir que el Estado garantice la seguridad y el funcionamiento de los sectores productivos esenciales.
“No es contra nadie; es por la necesidad de operar en condiciones dignas”, expresó.
Los organizadores reiteraron que el tránsito en carreteras, vías federales y cruces fronterizos será prácticamente nulo durante la jornada. Advirtieron que el transporte internacional también sufrirá afectaciones severas y que los retenes se instalarán en distintos puntos del país.
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Ante el panorama previsto, las agrupaciones pidieron a la población evitar viajes ese día y mantenerse resguardados en la medida de lo posible. Solicitaron también solidaridad y comprensión hacia las acciones del movimiento, al señalar que tanto campesinos como transportistas constituyen “la vértebra de la economía nacional”.
Con información de La Silla Rota y Tiempo.com
