Washington, Estados Unidos.- El verdadero costo de deportar a más de 11 millones de migrantes de Estados Unidos, tal y como se comprometió el presidente Donald Trump, está prestando mayor atención en las esferas políticas de este país por su alto costo.
Hasta que no haya más detalles del plan, gran parte de lo que requerirá de la aprobación del Congreso, las estimaciones son incompletas, sin embargo, cualquier contabilidad completa, incluyendo costos fiscales y económicas, será enorme.
Si Estados Unidos buscara deportar la totalidad de los 11 millones de indocumentados que se calculan viven en este país, incluidos los trabajadores, el costo sería de 500 mil millones de dólares, según una estimación de un instituto privado.
Campaña contra migrantes
La nueva iniciativa de Trump incluye la contratación de miles de nuevos agentes de inmigración, la construcción de nuevos centros de detención y un muro en la frontera con México, pieza central de la campaña electoral de Trump.
En su discurso ante una sesión conjunta del Congreso, Trump repitió su promesa de larga data de deportar a los aproximadamente 11 millones de inmigrantes no autorizados en Estados Unidos. De acuerdo con Trump, se trata de eliminar a los pandilleros, y a los traficantes de droga, que amenazan a las comunidades fronterizas.
El Foro de Acción de América estimó se necesitarían de entre 100 mil millones a 300 mil millones de dólares para detener y eliminar “todos los inmigrantes indocumentados que residen en el país, un proceso que se estima tomaría 20 años”.
Una vez que se retiraran a los inmigrantes indocumentados, se necesitarían otros 315 mil millones de dólares para financiar los esfuerzos de las autoridades para evitar que regresen, de acuerdo con el foro, un instituto de estudios sobre política interna, de tendencia conservadora.
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Esta estimación incluye sólo el costo de retirar a los trabajadores indocumentados; pero no toma en cuenta el impacto económico que resultaría de la eliminación de unos 11 millones de personas de la fuerza de trabajo y la consiguiente pérdida de gasto de los consumidores.
El foro estima que la deportación de estas comunidades reduciría el número de trabajadores estadunidenses por un 6.4 por ciento, lo que significa que dentro de 20 años, la economía de Estados Unidos estarían cerca de un seis por ciento más pequeña.
Eso equivale a una pérdida de 1.6 billones de dólares en salarios perdidos, gastos y demás actividad económica. (Notimex)
