El plan de Warner Bros Discovery para dividirse en dos empresas públicas independientes contempla que la nueva unidad de Global Networks retenga hasta un 20% de participación en el negocio de streaming y estudios, participación que se monetizará para reducir deuda.
La compañía anunció que separará sus operaciones de streaming y estudios de sus redes de televisión por cable, con la meta de completar la escisión a mediados de 2026.
La reestructuración implica que la división de streaming y estudios agrupará activos como Warner Bros. Television, Warner Bros. Motion Picture Group, DC Studios, HBO y HBO Max, además de las bibliotecas de cine y televisión.
Esta unidad quedará bajo la dirección del actual CEO, David Zaslav. Por su parte, el actual director financiero, Gunnar Wiedenfels, asumirá el liderazgo de la nueva compañía Global Networks, que incluirá marcas de televisión de entretenimiento, deportes y noticias, entre ellas CNN.
La decisión de escindir las operaciones responde a la necesidad de adaptarse a la transformación del consumo de medios, marcada por el abandono de la televisión de pago tradicional en favor de plataformas digitales.
La empresa, que surgió en 2022 tras la fusión de WarnerMedia (de AT&T Inc.) y Discovery Inc., arrastraba una pesada carga de deuda en un contexto donde el negocio de cable, su principal fuente de ingresos, perdía audiencia y publicidad. La separación permitirá que la unidad de streaming y estudios tenga mayor margen para crecer y producir contenido exitoso, sin verse limitada por el declive de las redes de cable.
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La escisión se estructurará como una transacción libre de impuestos y se espera que concluya a mediados de 2026. La noticia fue confirmada por la propia Warner Bros Discovery el lunes, en lo que representa el último gran movimiento en una industria que experimenta una fragmentación de los conglomerados mediáticos formados durante décadas.
El anuncio también se produce en un momento en que otras empresas del sector, como Comcast Corp., avanzan en estrategias similares. Comcast ha dividido NBCUniversal en dos: Versant, que agrupa canales de cable como MSNBC y USA, y otra unidad que incluye la cadena de televisión abierta NBC, el servicio de streaming Peacock y los parques temáticos Universal Studios.
La compañía comunicó que, para facilitar la transición, obtendrá un préstamo puente de USD 17.500 millones, que planea refinanciar antes de la escisión. Este financiamiento, proporcionado por J.P. Morgan, servirá para reestructurar la deuda existente. Además, la participación de hasta el 20% que Global Networks mantendrá en la unidad de streaming y estudios se utilizará como mecanismo para reducir aún más el endeudamiento.
“Al operar como dos compañías distintas y optimizadas en el futuro, estamos dotando a estas marcas icónicas de un enfoque más claro y la flexibilidad estratégica que necesitan para competir de manera más efectiva en el cambiante panorama mediático actual”, afirmó David Zaslav en un comunicado.
La separación de las divisiones de cable y streaming de Warner Bros Discovery se alinea con la tendencia de otras grandes empresas de medios, que buscan adaptarse a la caída de la televisión por cable y al auge de las plataformas digitales.
Analistas del sector, como Jessica Reif Ehrlich de Bank of America, consideran que los activos de televisión por cable de la compañía representan un “socio muy lógico” para la nueva empresa escindida de Comcast.
La reestructuración de Warner Bros Discovery comenzó en diciembre, cuando la empresa anunció la separación de sus operaciones de streaming y estudios, lo que muchos interpretaron como un paso previo a la escisión total. El objetivo es que cada unidad pueda enfocarse en sus fortalezas: la producción y distribución de contenido digital, por un lado, y la gestión de canales de televisión tradicionales, por el otro.
Con información de Bloomberg.
