Considerada como seda vegana, hace posible la creación de tejidos sustentables y ligeros con la reutilización de pulpa de naranja desechada.
La industria de la moda ocupa el segundo lugar en el ranking de las fuentes de mayor contaminación y gran parte de lo que produce genera un impacto ambiental negativo. Estos datos evidencian la necesidad de este sector de reinventarse y la búsqueda de otros materiales como la seda vegetariana hecha de la pulpa de naranja.
Esta nueva propuesta está desarrollada por dos italianas, Adriana Santanocito y Enrica Arena, la compañía Orange fiber, utilizan la fibra de naranja y aprovecha más de 700 mil toneladas que la industria alimenticia desecha por año, para crear un tejido que promete revolucionar la moda de lujo.
La seda hecha a partir de la celulosa es ligera, suave y puede ser opaca o brillante y su creación ya ha dado algunos premios a las emprendedoras, como el de Cambio Global de la Fundación H & M, organización que fomenta proyectos de sostenibilidad. Orange Fiber, también fue seleccionada para participar en un programa de aceleración de startups, Fashion for Good Plug and Play Accelerator, que se realiza en Holanda.
La seda vegetariana ya está siendo utilizado para producir textiles de lujo diseñador italiano Salvatore Ferragamo y esto es sólo el principio.