Lizianne, es ciudadana de Canadá. Un día salió a pasear a su jardín y se encontró con una grata sorpresa. Vio entre los arbustos a un gato negro callejero. Era muy dulce y provenía de una colonia de gatos cercana a su casa. Te contamos lo que pasó después.
La mujer canadiense pensó se sintió tentada en atender al gato, es así como le dio alimento y agua. El minino, seguramente, al recibir tantos gestos de cariño empezó a sentir confianza en la mujer.
Amor a toda prueba de gatos
Luego de tantas atenciones el gato empezó a engordar, tal vez más de la cuenta. Fue entonces cuando Lizianne no tardó en darse cuenta que los kilos no eran solo cosa de la comida: se trataba de una gata y estaba embarazada.
Cuando la gata tuvo a sus cachorros, en octubre de 2020, trató de alimentarlos por su cuenta. Sin embargo, parece que necesitaba ayuda y acudió a una mano amiga, la de Lizianne.
¿Cómo hizo? Sencillamente trasladó a sus cinco gatos, uno a uno, al jardín de su amiga humana. Con la intención de pedirle ayuda y muy probablemente ¿presentárselos?.
La caridad humana de Lizianne llegó a tal punto que se puso en contacto con una asociación de animales y llegaron justo a tiempo. Pues resulta que los mininos tenían dificultades para respirar y padecían conjuntivitis, un problema que genera incomodidades y molestias.
Mientras los gatitos recibían los mejores cuidados, la madre gata se quedó con Lizianne, quien esterilizó a la gata y ¡la adoptó!.
Con Información: Revelarte