La Embajada de Japón en Estados Unidos ha tranquilizado a los seguidores de Taylor Swift, asegurando que su concierto en Tokio la próxima semana no debería interferir con su asistencia al Super Bowl. Esto surge en medio de crecientes especulaciones sobre si la exitosa cantante podrá viajar desde Japón a Las Vegas a tiempo para apoyar a los Kansas City Chiefs y a su pareja, Travis Kelce.
En un comunicado lleno de ingeniosas referencias a los álbumes de Swift, el consulado expresó con confianza que la estrella debería poder llegar a Las Vegas antes del inicio del Super Bowl el 11 de febrero, si sale de Tokio poco después de su concierto la noche del 10 de febrero.
Los fans preocupados por la llegada de Swift a Las Vegas pueden estar tranquilos, sabiendo que puede “sorprender al público japonés” antes de regresar a Estados Unidos para apoyar a los Chiefs, vistiendo de rojo, según la embajada.
Kathleen Bangs, portavoz de FlightAware, dijo a NBC News que el viaje de Swift al Super Bowl es “totalmente factible”. Agregó que probablemente podría llegar a Las Vegas en 10 horas, ya que la zona horaria de Tokio está 17 horas por delante de Las Vegas, lo que le da más tiempo para volar desde Tokio a la “ciudad del pecado”.
Swift suele utilizar los jets privados Falcon 900LX y Falcon 7X, que podrían cubrir los más de 8,890 kilómetros de distancia entre Tokio y Las Vegas sin escalas. Sin embargo, es precisamente el uso continúo de estos jets que han generado múltiples críticas contra la cantante, pues aseguran que sus constantes viajes en avión generan contaminación.
Cabe destacar que un portavoz de la Administración Federal de Aviación advirtió que, aunque Swift podría llegar a tiempo para el Super Bowl, puede que no haya suficiente espacio para estacionar su avión privado, ya que es probable que los 475 lugares de estacionamiento alrededor de Las Vegas estén llenos debido al juego.
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Además, Heidi Hayes, portavoz del Departamento de Aviación del Condado de Clark, recordó que el estacionamiento de aviones privados alrededor de Las Vegas alcanzó su capacidad máxima en noviembre, cuando la ciudad fue sede del Gran Premio de Fórmula 1.
A pesar de que Swift podría regresar a Estados Unidos a tiempo para el Super Bowl, aún no está claro si realmente planea asistir al juego, aunque se trata de un momento importante para su pareja.
Con información de Milenio