Una nueva propuesta legislativa podría modificar la forma en que se entiende la participación electoral en México. El Partido Verde Ecologista de México (PVEM) presentó una iniciativa que busca establecer sanciones para quienes no acudan a votar, incluyendo la posibilidad de suspender la vigencia de la credencial del INE por hasta un año.
El diputado Luis Enrique Miranda, impulsor de la propuesta, argumentó que se trata de una medida para incentivar el voto obligatorio, con el objetivo de fortalecer la democracia y elevar los niveles de participación ciudadana en los comicios.
La propuesta llega en un contexto donde los niveles de abstencionismo han generado preocupación. En las elecciones federales más recientes, solo alrededor del 61% de los votantes registrados acudieron a las urnas. Para los diputados del PVEM, esta cifra es insuficiente y refleja la necesidad de implementar medidas más firmes para promover la participación.
Actualmente, el artículo 36 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece como obligación ciudadana el acudir a votar, participar en consultas populares y otros procesos democráticos. No obstante, esta obligación no contempla penalizaciones, lo que, según los impulsores de la reforma, debilita su eficacia.
El punto más polémico de la propuesta es la suspensión de la credencial del Instituto Nacional Electoral (INE), un documento indispensable no solo para votar, sino también para identificarse ante bancos, instituciones gubernamentales y otros trámites cotidianos. De aplicarse, esta medida podría tener repercusiones prácticas significativas para los ciudadanos sancionados.
Luis Enrique Miranda señaló que es necesario promover un sentido de responsabilidad cívica más sólido, pues en medio de los recientes cambios en el Poder Judicial, la participación ciudadana en los procesos electorales es más crucial que nunca para garantizar un equilibrio institucional y una representación real de la voluntad popular.
La iniciativa considera también contemplar excepciones, que se incluirían en leyes secundarias. Entre los motivos válidos para justificar la falta de participación se contemplarían enfermedades, emergencias personales o estar en el extranjero. Sin embargo, aún no se ha detallado cómo se comprobarían estas situaciones ni quién sería la autoridad responsable de evaluarlas.
Mientras algunos sectores ven en esta reforma una oportunidad para reforzar la cultura democrática en México, otros advierten que podría convertirse en una forma de coacción que vulnere los derechos individuales. El debate se ha intensificado especialmente en redes sociales y foros académicos.
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En el plano internacional, el voto obligatorio ya es una práctica común en países como Australia, Bélgica y Brasil. En algunos casos ha logrado elevar el porcentaje de participación electoral, pero también ha generado críticas sobre su implementación y las sanciones impuestas.
La discusión sobre esta propuesta apenas comienza en el Congreso. De ser aprobada, implicaría un cambio sustancial en la relación de los ciudadanos con los procesos electorales, abriendo un nuevo capítulo en el debate sobre derechos y deberes democráticos en México.
Con información de Mi Bolsillo.
