México.-En un discurso con motivo del 30 aniversario de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Rosario Piedra Ibarra, propuso convertir a este de organismo autónomo nacional, en una “Procuraduría de Pobres”.

La presidenta de la CNDH, Rosario Piedra Ibarra, señaló que lo anterior se lograría mediante una reforma Constitucional al artículo 102, apartado B. Para explicar su idea, la funcionaria dijo que, en 1947, se aprobó ” la propuesta humanista de Ponciano Arriaga para crear la Procuraduría de Pobres, que tenía el propósito de proteger a los pobres”. Ese organismo, dijo, tenía facultades para denunciar y exigir la reparación de daños.

“A 30 años del nacimiento de la CNDH y del agotamiento de su modelo de operación. Fracaso evidente en el enorme costo que ha representado para el pueblo, y los escasos resultados logrados, algo que no decimos nosotros, sino que han documentado infinidad de ONG’ s y organismos tanto nacionales como internacionales”, expresó Rosario Ibarra.

Adelantó que buscará “que las recomendaciones tengan carácter vinculante, que las autoridades las acaten y reparen el daño consecuencia de sus actos, tener sobre todo mayor incidencia en las políticas públicas. Reducir los gastos de la Comisión, optimizar los recursos, y centrarnos en lo que nos corresponde hacer: atender a las víctimas de violaciones de derechos humanos y a quienes están en riesgo de serlo”.

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Sin embargo, este hecho resultaría irónicamente anticonstitucional pues la CNDH es un órgano autónomo que tiene el deber de hace valer los derechos de cada mexicano, no de una clase social. Su doctrina defiende los derechos de cualquier persona contra abuso de poder, independientemente de su clase social.

Al respecto, el periodista Mauricio Schwarz, opinó que “como la defensa de los derechos humanos no fue operativa en anteriores gobiernos, pero el Tercer Imperio propone abandonarla en México a cambio de una demagógica Procuraduría de los pobres. No se trata de hacer que las instituciones funcionen, sino de destruirlas”.

En otra opinión, la defensora de los derechos humanos, fundadora y ex presidenta del Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED) de 2011 a 2018, Jacqueline L’Hoist, señaló: “Los derechos humanos son inalienables, son indivisibles y son inherentes a cualquier persona por el hecho de serlo”.