Un día después de que Andrés Manuel López Obrador recibiera su constancia como presidente electo por parte el Tribunal Elector del Poder Judicial de la Federación, el mandatario anunció que siempre sí tendrá un séquito de seguridad que le cuidará las espaldas.
Sin embargo, éste estará conformado por 20 personas muy cercanas a él, que no precisamente se han desempeñado como guaruras, sino que serán ciudadanos de a pie, sin armas, los que le brinden el blindaje necesario para dar rienda suelta a su cuarta transformación.
“Tomarán un curso o capacitación, pero no para el manejo de armas, sino para que haya una protección mínima, faciliten las cosas, que serán policías, soldados, marinos… mexicanos”, aseguró el propio líder me Macuspana.
Reveló también que Enrique Peña Nieto le recomendó que contara con una protección durante algunos meses, por lo menos de aquí al 1° de diciembre, a lo que Obrador le agradeció y le dijo que ya estaba listo con una “ayudantía”.
Sobre el tema a nivel nacional ha insistido que los únicos funcionarios públicos que contarán con escolta, serán los que se dediquen exclusivamente a asuntos en materia de seguridad.
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En tanto, el Estado Mayor Presidencial ya tiene que estarse preparando para formar parte de los cuarteles de la Secretaría de la Defensa Naciona, ya que Andrés Munuel López Obrador no quita el dedo del renglón sobre cohesionar estos grupos dado que… “son otros tiempos”.