Se dio a conocer una fotografía que muestra a dos hijos del gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, acompañados de Amílcar Olán, amigo de dos hijos del expresidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), y el presunto beneficiario de contratos millonarios para obras públicas en el primer sexenio morenista.
Fue Carlos Loret de Mola quien por medio de una de sus columnas dio a conocer la imagen. Definió la fotografía del empresario con Ricardo y Jesús Rocha Ruiz como “la salvación de Rocha Moya”, y explicó que la relación entre los hermanos y el contratista sería un “blindaje” para el gobernador sinaloense, debido a la relación de amistad que Amílcar Olán mantiene con los Beltrán López, hijos del ex mandatario federal.
El periodista señaló que la propuesta de Rocha Moya de pactar con el narco, la supuesta conexión con Ismael “El Mayo” Zambada y la violencia que azota a Culiacán no han sido suficientes para afectar al gobernador morenista, quien según”“parece gozar de un blindaje impenetrable”.
Loret de Mola recordó en su texto que, tras la detención de Ismael “El Mayo” Zambada, éste dijo que iba a tener una reunión con el gobernador Rocha Moya, pero terminó siendo una trampa para secuestrarlo y llevarlo a Estados Unidos.
“El gobernador de Sinaloa argumentó que había viajado a Estados Unidos en el avión de un compadre del ‘El Mayo’ Zambada y luego no aparecieron registros de su ingreso a la unión americana”, indicó.
Loret subrayó que además de la amistad con Amílcar Olán, los hijos del expresidente y los del mandatario sinaloense tienen otro rasgo en común: se les señala de presuntamente hacer negocios y repartir contratos gracias a las conexiones por los gobiernos de sus padres. Son “el poder detrás del trono”.
“Los hijos de AMLO y los hijos de Rocha Moya. Una misma generación en el poder. Los juniors del bienestar”” y agregó que “políticamente, son (los Rocha Ruíz) el poder tras el trono. Despachan en Palacio y cualquiera sabe que, si tiene reunión con el gobernador, ahí va a estar al menos uno de sus hijos. Desde ahí amarran alianzas y reparten contratos”.
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Cabe recordar que el mismo Carlos Loret denunció que Amílcar Olán era parte de una red de tráfico de influencias que le permitió hacer negocios lucrativos relacionados con el Tren Maya y para surtir medicamentos en hospitales, gracias a su amistad con Gonzalo y Andrés Manuel López Beltrán.
Pese a los audios y pruebas mostradas, el expresidente negó en todo momento los señalamientos y dijo que sus hijos no participaban en los megaproyectos, aunque más tarde dijo que sí tenían cargos honoríficos, que intervenían pero “no cobraban”.
Con información de Proceso, Latinus y El Universal.
