Con 79 por ciento de las actas computadas, la comisión electoral del PAN informó que el diputado federal Ricardo Anaya Cortés ganó la dirigencia nacional con 81 por ciento de la votación, mientras que su contendiente el senador Javier Corral obtuvo 16 por ciento de los sufragios.
Tal como se preveía, el legislador por Querétaro obtuvo el triunfo en una jornada electoral caracterizada por la baja participación de los panistas –se estima que apenas llegará a 50 por ciento– y las denuncias de acarreo.
El presidente de la comisión electoral, Héctor Larios, dio cuenta de dos incidentes; en Tixtla, Guerrero no se pudo instalar el Centro de Votación y en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, militantes del Partido Verde Ecologista de México y de Chiapas Unido bloquearon los accesos a un centro de votación.
Anaya obtuvo 146 mil 63 votos (81 por ciento), mientras Corral Jurado tuvo 29 mil 928 sufragios (16 por ciento), informó Larios al destacar que mañana se darán a conocer los resultados finales.
El virtual triunfador de la elección de dirigente nacional del PAN, Ricardo Anaya, se comprometió esta noche a hacer del partido una oposición crítica al gobierno de Enrique Peña Nieto, el cual se ha caracterizado por su ineficacia y por haber aumentado la pobreza en el país.
Luego que la comisión electoral del PAN dio a conocer tendencias preliminares que le dan el triunfo, dijo tenderle la mano a su contendiente Javier Corral, a quien calificó como un panista valioso que debe permanecer en el instituto.
Tras reconocer que los resultados le fueron más desfavorables de lo proyectado, el candidato a la dirigencia nacional del PAN, Javier Corral, consideró que el triunfo de su adversario, Ricardo Anaya, está trazado en “la inequidad, la simulación y la corrupción. porque se aprovecharon incluso de recursos púbicos”.
Sin embargo, dijo que ante la desconfianza que existe en el árbitro de la contienda, no tiene caso ni siquiera plantearse el escenario de pedir la nulidad de la contienda.
En una rueda de prensa ofrecida en su casa de campaña, Corral dijo que desde un principio se veía claramente la cargada oficialista en todo el país, entre diversas irregularidades como el padrón inflado o la supresión de algunos militantes de larga trayectoria en la lista nominal; a pesar de lo cual enfrentaron la contienda. A eso, se sumó que el propio Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación validó el padrón inflado gracias a las presiones oficialistas que ejercieron miembros del partido.
Subrayó que, si bien en seis estados del país se realizó un acarreo descarado, en otras entidades se registró un procedimiento más sofisticado, un acarreo hormiga en favor del candidato Anaya. (Fuente: La Jornada)