El Gobierno de Tamaulipas se prepara para presentar una denuncia formal ante instancias federales, tras el hallazgo de fragmentos que serían parte del cohete Starship de la empresa SpaceX, en Playa Bagdad, ubicada en el municipio de Matamoros.
La presencia de los restos metálicos fue reportada días después de la explosión del vehículo espacial Starship, ocurrida el pasado 27 de mayo en las instalaciones de la compañía, en Starbase, Boca Chica, Texas, justo frente a la frontera con México.
La detonación habría provocado la dispersión de piezas de la nave en diferentes direcciones, y algunas de ellas habrían cruzado hacia territorio mexicano, alcanzando la costa tamaulipeca.
Vecinos, activistas y visitantes que recorrieron la playa encontraron varios objetos extraños, incluyendo estructuras metálicas y tanques, que fueron retirados por precaución ante su posible peligrosidad para el medio ambiente y la salud pública.
Ante esta situación, la titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente de Tamaulipas, Karina Saldívar, informó que se iniciará un procedimiento legal a través de la Procuraduría Ambiental y Urbana de Tamaulipas (Paut), para que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) intervenga de manera oficial.
Saldívar detalló que los materiales encontrados podrían estar clasificados como residuos peligrosos, lo cual implica que el seguimiento debe ser encabezado por autoridades federales, aunque el estado participa activamente en las acciones de vigilancia y evaluación.
“Como autoridad estatal, estamos coadyuvando con las instancias federales competentes para que este hecho sea atendido con responsabilidad y conforme al marco legal, no podemos permanecer ajenos a una situación que representa un potencial riesgo para el entorno costero y la seguridad de la población”, declaró la funcionaria estatal.
Asimismo, pidió a la población mantenerse alejada de cualquier objeto de procedencia desconocida que encuentren en la playa y recomendó reportar estos hallazgos directamente a los servicios de emergencia llamando al 911.
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La denuncia pretende esclarecer si los fragmentos provienen efectivamente del cohete de SpaceX, y en caso de confirmarse, evaluar la magnitud del daño potencial al entorno natural y a la salud humana, así como exigir responsabilidades legales a la empresa de Elon Musk.
Este caso ha puesto nuevamente en debate los impactos transfronterizos de las actividades espaciales, especialmente cuando ocurren en zonas cercanas a ecosistemas frágiles y poblaciones costeras.
Con información de El Imparcial.
