Carlos Águila Arreola
Por segunda ocasión en casi un año, fue confiscada una caja que contenía corales vivos enviada por medio de paquetería, sin la documentación que acreditara su legal posesión y sin las condiciones adecuadas para su transporte.
Procedente de Veracruz, el descubrimiento ocurrió cuando miembros de la Guardia Nacional (GN), con un binomio canino, ingresaron a una empresa de mensajería en el municipio de Guadalupe en inspección aleatoria en busca de sustancias u objetos ilícitos.
Tras solicitar permiso para la inspección, el ejemplar canino mostró un cambio de conducta frente a una caja de cartón cubierta con plástico transparente, y etiquetada como “adornos”.
Se procedió a separar la caja de los demás envíos para someterla a revisión minuciosa y el personal de la GN encontró en el interior ocho bolsas de plástico que contenían agua y piezas de coral vivo de distintas formas.
Los corales están catalogados por la Norma Oficial Mexicana NOM-059-Semarnat-2010 como especies en riesgo sujetas a protección especial, por lo que fueron puestos a disposición de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) para su manejo, resguardo y conservación adecuados.
Hay tres especies de coral negro: Antipathes bichitoea, Antipathes grandis y Antipathes ulex, que están contemplados bajo la citada norma, en la categoría “Sujeta a protección especial”. Actualmente se conocen aproximadamente 840 especies, pero se estima que iete mil 500 han existido y cinco mil están extintas.
Bajo ese mismo estatus está el coral cuerno de ciervo (Acropora cervicornis) y el cuerno de alce (Acropora palmata) ─de gran presencia en las aguas frente a las costas quintanarroenses─; así como el blando o abanico de mar (Plexaura homomalla) y (Plexaurella dichotoma).
Hace casi un año, el 20 de agosto de 2023, también procedentes de Veracruz e igualmente en el municipio de Guadalupe, elementos de la GN aseguraron en una empresa de mensajería y paquetería una caja con 20 piezas de coral vivo.
El hallazgo ocurrió cuando los uniformados, también auxiliados por un binomio canino, ubicaron la especie marina protegida por la Norma Oficial Mexicana NOM-059-Semarnat-2010, bajo la categoría de “Sujeta a protección especial”.