En un reciente informe publicado por Latinus, se ha revelado un escándalo de corrupción que involucra a “El Clan”, una red de tráfico de influencias y negocios liderada por Andy y Gonzalo “Bobby” López Beltrán, hijos del presidente Andrés Manuel López Obrador. Según el informe, El Clan ha acumulado miles de millones a través de sus operaciones.
El informe señala que El Clan entregó miles de metros cúbicos de balasto, la piedra sobre la que se colocan las vías del tren, para el proyecto del Tren Maya sin las debidas certificaciones de calidad. Esta operación pudo llevarse a cabo gracias a actos de corrupción, en los que El Clan sobornó al laboratorio encargado de realizar las pruebas de calidad al balasto.
Amílcar Olán, un contratista vinculado a gobiernos de Morena y amigo cercano de los hijos del presidente, ha sido identificado como el vendedor del balasto al Tren Maya.
Latinus obtuvo acceso a conversaciones entre Amílcar y Pedro Salazar Beltrán, primo de Andy y Gonzalo “Bobby” López Beltrán. En estas conversaciones, se revela la cantidad de dinero que se entregó para evitar que el balasto fuera sometido a pruebas físicas y químicas.
En uno de los audios obtenidos, Pedro Salazar Beltrán se burla de la red de corrupción de El Clan y hace un comentario preocupante sobre la calidad del balasto: “Ya cuando se descarrile el tren (Maya), ya va a ser otro pedo”.
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Este escándalo plantea serias preguntas sobre la integridad del proyecto del Tren Maya y la implicación de la familia presidencial en actos de corrupción.
Con información de Latinus