Al menos 10 mil personas marcharon este domingo en Culiacán, capital de Sinaloa, para exigir un alto a la violencia y la inseguridad en la región, así como la renuncia del gobernador Rubén Rocha Moya, quien ha sido acusado de tener vínculos con el narcotráfico.
Miles de personas gritaron “¡Fuera Rocha!” y coreaban “Sacaremos a ese güey de Sinaloa”, con la misma tonada de la banda recordando aquella canción de “Los Felinos”.
Fue una marcha multitudinaria en la que mujeres, hombres y niños exigieron paz y justicia. Fue la explosión del enojo tras cinco meses de violencia exacerbada en los municipios de Culiacán, Navolato, Eldorado, Cosalá, Elota, San Ignacio, Concordia y Mazatlán.
Han sido desaparecidas casi mil personas y otras 800 fueron asesinadas en ese periodo. Sus familias son las que encabezaron la marcha, asegurando que lo esencial les ha sido robado: la justicia.
Las autoridades aseguran que es la confrontación de dos grupos criminales del Cártel de Sinaloa (“Los Chapitos” y “Los Mayitos”), pero eso se ha llevado ya a centenas de personas inocentes.
La protesta se realizó por segunda vez en la misma semana, en respuesta al asesinato de dos menores, Gael y Alexander Sarmiento, de nueve y 12 años, quienes fueron ultimados en Culiacán, junto con su padre el 19 de enero en un ataque del crimen organizado.
Los manifestantes, muchos de ellos vestidos de blanco, marcharon por las calles de la capital sinaloense exigiendo justicia y seguridad.
El asesinato del papá y sus dos niños, en lo que aparentemente fue un intento de robo de auto, fue la chispa que detonó el descontento, lo que movió las fibras entre los culiacanenses, quienes apuntaron al gobernador Rubén Rocha en la primera marcha, el 24 de enero.
“¡Fuera Rocha! ¡Fuera narcogobernador!”, gritaban cientos de mujeres y hombres mientras caminaban por las calles del centro de Culiacán y el Centro Sinaloa, donde está Palacio de Gobierno.
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La protesta subió de tono y un grupo de personas irrumpió en la sede del gobierno estatal e incluso en el despacho del mandatario Rocha Moya, donde rompieron cristales, destrozaron paredes de tablaroca, sillas, escritorios, papelería y varios equipos de cómputo.
Durante la protesta se quemó una piñata con el rostro del gobernador y se corearon consignas como “¡Fuera Rocha!” y “Sacaremos a ese güey de Sinaloa”. Algunos manifestantes también amenazaron con quemar el Palacio de Gobierno si sus demandas no eran atendidas.
Video: Marchan miles en Culiacán, Sinaloa, contra la narcoguerra y el gobernador Rubén Rocha Moya
