Hoy descubriremos los destinos más maravillosos, fascinantes y exóticos, donde la naturaleza parece jugar con nuestros sentidos, pues tal parecen son sacados de otro mundo. Lugares únicos que din duda querrás conocer y visitar.
Cueva Grjótagjá
Esta pequeña cueva de lava ubicada en Islandia, a simple vista parece poca cosa, pero en su interior esconde un pequeño lago de aguas termales.
Desde el siglo XVIII hasta la década de 1970, Grjótagjá era una zona de baño popular. Pero con las erupciones producidas de 1975 y 1984 la temperatura del agua subió a más de 50 °C, y aunque ahora han caído unos grados ya no es posible tomarse un baño sin escaldarse.
Dato curioso: para los seguidores de Juego de Tronos, esta es la cueva donde Jon Nieve y la pelirroja salvaje dan rienda suelta al amor…
El lago rosa Retba
En Senegal, hay un popular lago lago Rosa, aunque su nombre original es Retba, un lago de fácil de llegar desde la capital, Dakar.
La magia de su color se debe a las grandes concentraciones de un alga, la Dunaliella salina, habituada a vivir en ambientes extremos. Y es que la concentración salina que alcanza este lago es de un 40%, por ello además la flotabilidad de este lago es enorme.
Esta alga se protege de las condiciones de radiación, salinidad y temperatura del entorno produciendo grandes cantidades de beta carotenos, de donde surge el color, que puede ir desde el rosa amarronado al fucsia, esto dependiendo del día que se visite.
Gran Fuente Prismática
En el Parque Nacional de Yellowstone, Estado Unidos, se encuentra este famoso destino que es un verdadero regalo de la naturaleza, una colección de maravillas en forma de cañones, formaciones rocosas, géiseres y por supuesto sus pintorescas fuentes termales.
La más espectacular es la Grand Prismatic Hot Spring, o la Gran Fuente Prismática, es la mayor fuente termal de Estados Unidos, y la 3ª del mundo. Un verdadero ejemplo de los joyas que puede crear nuestro planeta.
De este destino se puede decir mucho más, como que es tan profundo como un edificio de 10 pisos, y que se extiende como un campo de fútbol. Sus colores forman un vivo arcoíris, naranja, amarillo, verde y el intensísimo azul, gracias a las bacterias termófilas… Pero no hay nada como verlo humear en directo y maravillarse con sus colores, te sentirás como en otro planeta.
Perito Moreno
Una imponente masa de hielo azul e interminable avanza pocos centímetros cada año en Argentina y en verano el deshielo rompe el arco que forma con la tierra creando un espectáculo perseguido por los viajeros más curiosos.
Está rodeada de bosques y montañas este es un espectáculo que hay que vivir.
Islas de San Blas
Conformada por 365 pequeñas islas e islotes descansan frente a la costa sur del Caribe de Panamá, sólo 80 están habitadas por los indígenas Guna, que son al mismo tiempo dueños de las islas.
Estas Islas de San Blas son un auténtico paraíso virgen que nada tiene que ver con los masificados destinos caribeños para grandes multitudes, para empezar porque llegar hasta allí no es fácil, lo mejor es en avioneta, una de esas que convierten el viaje en una aventura, de las que aterrizan en una isla que desde el cielo no parece mayor que una moneda.
También es posible acceder desde un velero, lo que permite ir de isla en isla descubriendo los distintos estilos de vida, sus fondos marinos y sus solitarias playas, lo que siempre soñaste del Caribe, eso es San Blas.
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