Elon Musk dueño de empresas como X (antes Twitter) y SpaceX, inició un nuevo frente legal al presentar una demanda contra Apple y Open AI, a quienes acusa de ejercer un monopolio en el sector de la inteligencia artificial. Según el magnate, ambas compañías habrían limitado la libre competencia en este mercado en expansión.
La querella fue presentada en un tribunal de Texas, donde el equipo jurídico de Musk, a través de su firma xAI, sostiene que las dos empresas “conspiraron de manera ilegal” para obstaculizar el desarrollo de rivales en el ámbito de la IA.
El documento legal también señala que Apple ha restringido la visibilidad de aplicaciones como X y Grok (sistema de inteligencia artificial desarrollado por Elon Musk) dentro de su App Store, lo que, asegura, está afectando directamente su alcance frente a los usuarios. Por ello, solicitó una compensación millonaria por daños y perjuicios.
La acción judicial marca un nuevo episodio en la confrontación del también dueño de Tesla con OpenAI, compañía que él mismo cofundó hace casi una década. De acuerdo con el empresario, la firma se habría alejado de su misión inicial, la cual estaba orientada a operar sin fines de lucro y en beneficio de la humanidad.
Cabe recordar que hace poco más de un año, Musk ya había llevado a OpenAI a los tribunales bajo el argumento de que la organización se había convertido en una empresa de carácter comercial, priorizando los intereses económicos por encima del desarrollo abierto de la tecnología.
Y es que el magnate sudafricano habría aportado cerca de 50 millones de dólares para arrancar laas operaciones de Open IA en 2015. Además, continúo dando dinero tras salirse de la compañía en 2018; por lo que esto sería suficiente para reclamar el rumbo de la empresa a pesar de que ya no trabaja en ella.
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Por otra parte, Apple, no ha emitido un pronunciamiento oficial respecto a la acusación, aunque en ocasiones anteriores la compañía ha defendido sus políticas de selección y visibilidad de aplicaciones en su tienda digital, argumentando criterios de seguridad y calidad.
La disputa legal apenas comienza, pero podría marcar un precedente en la regulación y el debate sobre el papel de las grandes tecnológicas en el desarrollo de la inteligencia artificial.
Con información de Sopitas.com