Aunque en el sur de Francia, cerca de la ciudad de Cannes, un antiguo parque acuático se encuentra cerrado al público, aún alberga vida. Se trata de dos orcas y una docena de delfines que continúan cautiverio, pese al abandono de las instalaciones.
Los animales se encuentran en lo que fue Marineland Antibes, un acuario que cerró sus puertas en enero de este año, luego de que el gobierno de Francia prohibiera los espectáculos con cetáceos. Desde entonces, Wikie, una orca de 23 años, y su cría Keijo, de 11, permanecen confinados en estanques deteriorados, junto a 12 delfines.
Imágenes recientes captadas desde drones muestran las instalaciones invadidas por algas, sin mantenimiento ni visitantes, mientras los animales nadan en aguas aparentemente sucias. La escena ha generado preocupación entre organizaciones defensoras de los derechos animales.
Una de ellas, es la agrupación TideBreakers, que se encargó de denunciar públicamente la situación e instó a las autoridades francesas a actuar con urgencia.
“Las condiciones de vida de estas orcas son inaceptables. Su salud está en riesgo y necesitan ser reubicadas lo antes posible”, advirtió la organización.
A pesar de la presión, el futuro de estos cetáceos sigue siendo incierto. El gobierno de Francia ha bloqueado un intento de traslado a Japón, mientras que España se negó a recibirlos en Loro Parque, en Tenerife, bajo el argumento de que no cuentan con espacio suficiente para albergarlos de forma adecuada.
Ante este panorama, algunas organizaciones internacionales han puesto sus esperanzas en Canadá. El Whale Sanctuary Project (WSP), una iniciativa que busca crear santuarios marinos para cetáceos retirados, ha propuesto trasladar a las orcas y los delfines a una reserva natural en Nueva Escocia, diseñada para ofrecer un ambiente más adecuado y ético.
Cabe destacar que esta organización también estuvo involucrada en el caso de Keiko, la famosa orca que protagonizó la película “Liberen a Willy“ en 1993, quien vivió por años en el parque temático Reino Aventura (hoy Six Flags México), antes de ser trasladado a un santuario marino. Asimismo, es importante aclarar que Keijo, el hijo de Wikie, no tiene ninguna relación con Keiko.
Keiko fue liberado en los primeros años de la década de los 2000 y falleció en 2003. En cambio, Keijo nació en cautiverio en Francia y nunca ha vivido fuera de un acuario, por lo que su liberación en mar abierto no es considerada viable por los expertos.
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El Whale Sanctuary Project ya había presentado su propuesta al Ministerio de Ecología francés a principios de año, pero fue rechazada. No obstante, la organización ha insistido en su solicitud, argumentando que esta sería la única opción viable para garantizar una vida digna a los animales.
Especialistas en fauna marina coinciden en que ni las orcas ni los delfines pueden sobrevivir por sí solos en el océano, ya que nacieron en cautiverio y no desarrollaron las habilidades necesarias para cazar o protegerse. Sin embargo, también advierten que mantenerlos en el abandono es igual de inaceptable, por lo que exigen una solución urgente.
Con información de Excelsior.