Si crees que en todo el mundo la Navidad es celebrada de la misma manera, estás muy equivocado, pues las tradiciones navideñas alrededor del mundo pueden parecernos locas por lo distintas que son a lo que estamos acostumbrados.
Usualmente sabemos que la Navidad es colocar tu arbolito, decorar tu casa, preparar el pavo, hacer intercambio de regalos o seleccionar películas navideñas para ver en familia al día siguiente o durante la celebración de Navidad, sin embargo, las tradiciones en torno a esta fecha en distintos países del mundo pueden ser muy distintas a lo que imaginamos.
Estas son solo algunas de las más extrañas:
Navidad en Irlanda
En Irlanda el 8 de diciembre llega oficialmente la Navidad, cuelgan muérdago de sus puertas para simbolizar paz y buena voluntad y no como significado de besos. Santa Claus es un hombre rudo, al que los niños pequeños le dejan un platillo acompañado de cerveza o whisky.

Navidad en Japón
Las religiones mayoritarias del país nipón son el budismo y el sintoísmo, por lo que las Navidades no son una fiesta autóctona. Desde la segunda Guerra Mundial y con la influencia de otros países empezó a celebrarse la Navidad en Japón. La costumbre de regalar entre los familiares y amigos viene de la influencia americana.
Además la televisión les ha hecho creer que la cena navideña se celebra con cubetas de pollo frito (Kentuchy Fried Chicken) y desde octubre comienzan a reservar mesas en alguna de estas franquicias para festejar con la ‘tradición de occidente’.

Aunque en algunas familias la cocina tradicional japonesa está basada en productos frescos de temporada, una laboriosa elaboración y una estética visual.
Navidad en Ucrania
En Ucrania la Navidad se celebra el 6 de enero. La cena de la Víspera de Navidad que se llama “Sviatá Vecheria”-“la santa cena” y tiene un toque más terrorífico, algo similar a lo que intenta Jack en ‘El extraño mundo de Jack’, debido a que de acuerdo con la tradición el arbolito se decora con telarañas y ‘esferas’ de arañas como símbolo de suerte.

Según sus leyenda, una señora viuda vivía con sus hijos en una cabaña y como eran tan pobres, únicamente podían decorar su casa con un pequeño árbol de Navidad, no obstante, durante la Nochebuena las arañas tejieron sus telas para decorar el pino y cuando a este le dieron los rayos del sol, se transformaron en oro y plata. La familia, por supuesto, dejó de ser pobre.

Navidad en Austria
Así como llega Santa Claus con regalos navideños, un demonio llamado Krampus se lleva a los niños que se han portado mal para comérselos.
Aquí no hay nada de carbón ni nada parecido, en Austria o te portas bien o te come Krampus.
Gracias a esta leyenda, ya es costumbre que a principios de diciembre los jóvenes se disfracen y salgan a recorrer las calles en busca de niños para aterrorizarlos.

Sin duda las tradiciones de Latinoamérica son un poco más ‘amables’ y hogareñas que las de algunos países, pero en la diferencia radica la riqueza de nuestro mundo.