La imagen de un monito abrazando a su madre muerta por un leopardo, rápidamente se volvió viral en redes sociales pues estremeció de sobremanera a los internautas.
Los hechos se registraron en el Parque Nacional South Luangwa de Zambia. Una hembra de leopardo capturó y mató a una madre babuino.
El bebé de la monita todavía estaba vivo y aferrado a su madre. El cachorro de la leopardo jugó durante más de una hora con el bebé monito antes de matarlo: parecía que le hubieran llevado la presa viva para que aprendiera a cazar.
La imagen fue nominada por National Geographic como la mejor fotografía de naturaleza 2022.
El prestigioso fotógrafo Igor Altuna, quien viaja por el mundo capturando la vida salvaje, captó esta fotografía.
Recordó que estaba haciendo un safari cuando visualizó una leoparda a lo lejos que llevaba algo en la boca. Cuando se acercó, se dio cuenta que se trataba de una mona muerta cuya cría permanecía aferrada al cuerpo de su madre.
Esta leoparda, bautizada por los lugareños como Olimba, tiene una cría que estaba escondida un árbol, a quien llevó a su presa.
El cachorro de Olimba estuvo jugando por una hora con el bebé monito, hasta que como su madre, lo mató para devorarlo.

El monito intentó escapar, pero su suerte estaba perdida. Se escondía y se ocultaba tras los árboles.
Aunque pueda parecer algo cruel, es parte de la naturaleza, del equilibrio del ecosistema y de la cadena alimenticia, algo en lo que el humano no debe intervenir.