Myanmar enfrenta una tragedia de enormes proporciones tras el potente sismo de magnitud 7.7 que sacudió el país el pasado viernes al mediodía. Según cifras oficiales, el desastre ha dejado un saldo de al menos 2 mil 719 muertos y 4 mil 521 heridos, mientras las labores de rescate continúan en medio de dificultades extremas.
Este miércoles, un rayo de esperanza iluminó la sombría situación cuando un hombre de 26 años fue rescatado con vida tras pasar casi 108 horas atrapado bajo los escombros de un hotel en la capital. Naing Lin Tun, empleado del establecimiento colapsado, fue localizado gracias a una cámara endoscópica. Rescatistas turcos y locales trabajaron durante más de nueve horas para liberarlo a través de un agujero perforado en el suelo. En un video difundido por bomberos, se observa al hombre débil, cubierto de polvo, pero consciente, mientras se le administraba un goteo intravenoso.
El terremoto no solo devastó infraestructura y comunidades en Myanmar, sino que también tuvo repercusiones en Tailandia. En Bangkok, el colapso de un edificio en construcción dejó 22 muertos y 34 heridos. Las cifras de víctimas en Myanmar podrían ser aún mayores, ya que numerosas localidades permanecen incomunicadas debido a la falta de electricidad y telecomunicaciones.
En el municipio de Singu, a 65 kilómetros de Mandalay, un derrumbe en una mina de oro cobró la vida de 27 mineros, según reportó la Voz Democrática de Birmania.
El desastre natural se suma a la crisis humanitaria ya existente en Myanmar, donde más de tres millones de personas estaban desplazadas y casi 20 millones enfrentaban vulnerabilidad extrema, de acuerdo con datos de la ONU. Ahora, el sismo ha incrementado las dificultades, obstaculizando los esfuerzos de ayuda y recuperación en un país que ya enfrentaba graves desafíos.
Mientras Myanmar lucha por recuperarse, la catástrofe resalta la fragilidad de la región ante eventos naturales extremos y la urgente necesidad de apoyo internacional para mitigar su impacto.
Los rescates tras un terremoto son operaciones complejas y desafiantes que requieren rapidez, coordinación y especialización para salvar vidas en medio del caos. Estos esfuerzos suelen implicar diversas etapas y técnicas, adaptadas a las condiciones y magnitud del desastre.
Tal vez te gustaría leer: Video: Rescatan a mujer que estuvo 30 horas bajo los escombros tras el terremoto en Myanmar
En grandes desastres, la cooperación internacional es fundamental. Países vecinos y organizaciones globales envían equipos de rescate, médicos y suministros. Grupos como la ONU y la Cruz Roja suelen jugar un papel central en la organización y despliegue de estos recursos.
Con información de El Imparcial