El reciente ataque a Yazdan, un niño de Afganistán de dos años que llegó a Rusia junto a su madre en busca de un futuro más seguro, parece estar siendo superado al informarse que el pequeño salió del estado del coma en el que estaba y su recuperación está siendo favorable.
Yazdan fue víctima de un acto de violencia sin sentido cuando Vladimir Vitkov, un ciudadano bielorruso de 31 años, lo levantó y lo azotó violentamente contra el piso en la zona de recogida de equipaje del aeropuerto Sheremetyevo, en Moscú, Rusia, el 24 de junio.
El impacto le provocó lesiones graves: fracturas en el cráneo y en la columna vertebral, además de un estado crítico que lo mantuvo en coma durante varios días.
Yazdan sale del coma luego de que un sujeto lo atacara en un aeropuerto de Rusia
Afortunadamente, Yazdan ha mostrado una sorprendente fortaleza. Los médicos informaron que ya se encuentra fuera de peligro vital, puede comer por sí mismo y reacciona a estímulos, aunque sigue bajo observación para evaluar posibles daños neurológicos y el trauma emocional que le ha dejado el ataque.
👶 Little Yazdan, the 2-year-old who was slammed to the floor at Sheremetyevo Airport, is on the mend—he’s now able to eat on his own. This morning, he had a banana and some mashed potatoes for breakfast.
He’s still cautious around unfamiliar adults, which is no surprise. But… https://t.co/46Wib72DRh pic.twitter.com/r8At929WzO
— Vladcoin 🇷🇺 Putin News (@runews) July 4, 2025
Este trágico caso de violencia puso en evidencia la vulnerabilidad de las familias refugiadas y migrantes que, como Yazdan y su madre, huyen de zonas de conflicto con la esperanza de encontrar seguridad. La madre del menor relató que abandonaron Afganistán para escapar de la violencia, sin imaginar que enfrentarían una tragedia en un país extranjero.
Hoy su principal preocupación es el miedo persistente de su hijo hacia cualquier extraño, un indicio claro del profundo trauma psicológico que enfrentará durante su recuperación.
Las autoridades rusas confirmaron que Vladimir Vitkov dio positivo en un test toxicológico por consumo de cannabis y se le encontraron drogas en su posesión cuando fue arrestado.
Además, se reveló que había sido despedido recientemente de un empleo en Egipto por no pasar controles de drogas y alcohol. Durante sus primeras declaraciones, Vladimir Vitkov admitió su responsabilidad en el ataque y lo justificó diciendo: “Intenté asesinar a un niño. ¿Mi motivo? No lo sé. Estaba drogado”.
Este caso ha reabierto el debate sobre la seguridad en aeropuertos, la atención psicológica inmediata a víctimas de agresiones y la necesidad de programas de apoyo para familias refugiadas que enfrentan traumas adicionales en sus países de acogida.
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Organizaciones de derechos humanos ya se han pronunciado para exigir que se refuercen los protocolos de protección y vigilancia en zonas de tránsito internacional, especialmente para personas vulnerables.
Mientras tanto, Vladimir Vitkov permanece bajo custodia y enfrenta cargos por intento de homicidio y agresión agravada. De ser declarado culpable, podría enfrentar una larga condena. Para la familia de Yazdan, sin embargo, la justicia más urgente es garantizar que el pequeño reciba la atención médica y emocional que necesita para superar esta terrible experiencia.
Con información de: Red Uno