PLAYA DEL CARMEN, MX.- El combate a la trata de personas no sólo debe involucrar al sector gubernamental y organismos internacionales como la UNESCO y ONU, sino también a los trabajadores de la industria turística.
La delegada de la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Quintana Roo en Solidaridad, Irma Granados Zapata, urgió en que se involucre también a empresas y sindicatos en la lucha contra ese flagelo que atenta cada vez contra personas más jóvenes, incluso bebés.
Los países de tercer mundo que no gozan de una estabilidad económica vuelven vulnerable a cualquier persona. Es en las zonas fronterizas donde se da más, debido al flujo de migrantes en busca de una mejor oportunidad de vida.
“Trabajadores prefieren trabajar para una organización delincuencial que para un lugar más digno, eso resume que no es una labor sólo de los gobiernos sino de la ciudadanía, de nosotros también, del autocuidado y saber cuántas formas de vulnerabilidad pudiera yo tener”, lapidó.
La trata no sólo se refiere a la esclavitud sexual, sino involucra a conflictos bélicos con niños soldado y al trabajo forzado.
“La esclavitud moderna trabaja en cadenas de suministro. Por ejemplo un hotel tiene que comprar sábanas, ¿cómo yo sé que esas sábanas no son hechas por gente esclavizada, por gente que tiene un salario digno?”.
Los hoteles de la Riviera Maya pueden poner de su parte teniendo conocimiento de quienes son sus proveedores en las cadenas de suministro, para tener la certeza que se otorga un sueldo digno a quienes elaboran los productos que utilizan.