A pesar de llevar su cara estaba cubierta con el cubrebocas, la inseguridad de C.M.U.A. era notoria, el tono de su voz errante e interrumpida formó parte de sus declaraciones al momento de denunciar sobre el acoso sexual que recibe por parte de desconocidos mediante las redes sociales y la calle.
El hecho sucedió a causa de unas fotografías que confió a una persona que conoció vía Whatsapp, quien luego de dos meses de conversación le pidió unas fotos íntimas, las mismas que posteriormente difundió sin su autorización con otras personas y ahora le causó un infierno.
C.M.U.A es natural de la ribera del Río Hondo, el día de ayer en la mañana acudió a la Fiscalía Especializada en Delitos contra la Libertad Sexual y el Libre Desarrollo de la Personalidad de la Fiscalía General del Estado (FGE), a interponer la denuncia que quedó registrada con el número FGE/QROO/OPB/09/4162/2020.
“Yo platicaba con un señor por el WhatsApp, teníamos como dos meses platicando, me pidió fotos íntimas y yo las mandé y después me enteré que alguien más las tuvo y las empezó a compartir a grupos en el Facebook”. Este podría catalogarse como violencia digital y conforme a un tipo de penal nuevo en Quintana Roo, puede ser castigado con cuatro y ocho años de cárcel.
Con información de Sipse