Playa del Carmen.- Una mujer que llegó procedente de Tabasco a la casa de su hija hace tres días comenzó a sentirse mal y al poco rato comenzó a vomitar sangre. Aunque se le llevó al Hospital General, al llegar allí, ya había fallecido.
Herlinda B. L., de 67 años de edad, padecía de hipertensión y diabetes, factores que podrían haber contribuido a su veloz y abrupto deceso, de acuerdo a lo que explicó su hija. A pesar de ser población vulnerable, decidió viajar de Tabasco a Quintana Roo a visitar a su hija.
La hoy occisa no había manifestado malestar alguno antes de anoche, cuando de pronto dijo sentirse mal y que le faltaba el aire. Poco después, comenzó a vomitar sangre. La hija llamó a una ambulancia, pero al tardar en llegar, decidió llevarla en su coche al Hospital General, aunque llegó sin vida.
De acuerdo a los médicos, es posible que hubiera muerto por broncoaspiración (se asfixió con su propio vómito). La familia pidió que se le catalogue como muerte natural, sin necropcia.
