Playa del Carmen, Quintana Roo.– Autoridades de Profepa solaparon la devastación ocurrida en el predio de Albatros, a corta distancia de Coco Beach, pues ignoraron las múltiples denuncias interpuestas por la tala de mangle, incluida la de los propietarios de este lugar, pues ellos han sido víctimas de despojo.
Así lo afirmó Gerardo Nájera Ojeda, representante legal de los dueños de este lote, Issac Eskenazi Dichi, Eyal Ushdi, Avigdor Usdi Cohen, quienes lo adquirieron en 2003 directamente de Infovir y que figuran desde entonces en el Registro Público de la Propiedad cono únicos y legítimos propietarios.
A los pocos años de comprar y titular el lugar, entró en vigor la ley federal que protege al mangle, por lo que ya no pudieron aprovechar el terreno, quedando únicamente un pasillo para guardar algunas embarcaciones o vehículos.
Sin embargo, en junio de este año, según el abogado, gente ajena al lugar ingresó y comenzó a devastar la vegetación, lo que los dueños descubrieron y denunciaron; el despojo ante la Fiscalía y el ecocidio ante Profepa.
Sin embargo, en la delegación de Profepa les dijeron que cualquier denuncia sobre el predio debía ir directo a Ciudad de México, lo que les pareció extraño, máxime cuando, pese a todas las denuncias recibidas, no sólo de ellos, sino de ambientalistas y el propio Ayuntamiento, esta dependencia se ha negado a actuar.
Van con la PGR
Ante esta inacción, acudieron a la Procuraduría General de la República, por ser un delito ambiental. La PGR invitó a la Profepa a unirse a la denuncia y coadyuvar en la investigación, lo que esta dependencia se negó a hacer.
Según Nájera Ojeda, a través de la Fiscalía, lograron obtener información sobre quién probablemente ordenó el desmonte, aunque no así el despojo, existiendo toda una red de funcionarios y exfuncionarios coludidos en este hecho, con protección federal.
“Por donde se destape, hay algo ilegal. Si no fuera por la Fiscalía y PGR, ninguna autoridad habría hecho nada”, se quejó.
Actualmente, ya interpusieron denuncia ante el órgano interno de Profepa por la negligencia cometida, indicativa de corrupción.
En tanto, exhortaron a la ciudadanía a tener cuidado y no dejarse engañar por quien sea les haya despojado el terreno y que ahora pretenda venderlo.
“Esto era un terreno de varias hectáreas, que comenzó a ser dividido por Infovir, empezando por cuatro lotes, de los que mis clientes compraron el 1 y el 2. No hay manera en que alguien más pudiera legalmente haberlo adquirido”, alegó.
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Sabe que hace unos años gente presentó un título falsificado, que fue rechazado en tribunales, por lo que existe la sospecha de que podría ser esta misma gente nuevamente.
