Playa del Carmen.- Luego que ciudadanos de Palmas 2 denunciaran las diversas irregularidades que han presentado las viviendas adquiridas a la constructora Hogares Unión, dentro de las que destacan los materiales de pésima calidad, obras inacabadas y que hasta se “colgaron” para proveer de electricidad a las áreas públicas, heredando así una multa a los colonos, hoy estos afectados fueron a protestar a las oficinas de la empresa.
“No hay una caseta de vigilancia digna, para que esté el vigilante con su baño; la alberca, nos engañaron diciendo que era nueva, cuando ya tenía ocho años; esa zona la utilizaron para promover sus casas; era y es todavía el área de ventas; todavía tienen casas de muestra y esas corresponden a esta sección que están vendiendo”, lamentó en entrevista una de las ciudadanas perjudicadas por Hogares Unión.
La empresa utiliza el pretexto de las casas de venta, para evitar hacerse responsable de concluir muchas obras que prometió tener listas, cuando ofreció las viviendas a los compradores potenciales.
“No quieren terminar el acceso principal; no quieren reparar la alberca; la bomba, no nos han dado garantías”, detalló.
Y es que cabe recordar que algunos de los problemas que han externado padecer los habitantes de Palmas 2 son: un acceso principal inacabado, una alberca en pésimas condiciones, la caseta de vigilancia en malas condiciones, falta de contenedores para basura, áreas verdes sin reforestar, y sobre todo, la deuda de 70 mil pesos que les dejó Hogares Unión, porque se “colgó” para proveer de luz a las áreas comunes.
Además, llevan un mes sin bomba de agua y no hacen válida la garantía, por lo que ni siquiera tienen agua en sus casas.
“Esto provoca que el agua de la alberca no circule, se estanque y sea un foco de infección. Estamos haciendo lo posible por mantenerlo bien, pero ¡ya basta!; y encima de todo no están cumpliendo con las garantías de las casas; hay que estarles rogando para que vayan a hacer las reparaciones porque no cumplen”, lamentó.
Lo que más les indigna, es que dicen que los condominios no tienen ni un año de haber sido entregados y presentan diversos problemas y las garantías, creen, no se las van a cumplir.
La gota que derramó el vaso, dicen, fue la deuda con CFE. Y además indican, la situación se repite por privada, pues cada una
UN NEGRO HISTORIAL DE HOGARES UNIÓN
Sin embargo, este caso no es el único por el que ha sido denunciado Hogares Unión y/o Conjunto Parnelli, otra de las razones sociales que emplea.
Por ejemplo, en Cancún, desde hace cerca de seis años se denunciaron problemas en el Fraccionamiento La Joya, construido por la misma empresa.
De entrada, se denunció que las casas estaban pésimamente construidas, con materiales de muy mala calidad.
Habitantes denunciaron entonces a los medios que tuvieron problemas con paredes con problemas de humedad; incluso hubo un caso donde un techo se vino abajo.
Sin embargo, los problemas fueron mayores, pues se supo que el fraccionamiento se había construido sobre cenotes, lo cual puso en riesgo la vida de los habitantes.
Fue en una vivienda, justo en la entrada de la misma, cerca de la puerta, donde la tierra literalmente se hundió y casi se van en ese hueco una señora de la tercera edad y un niño de seis años.
Pese a que los propietarios de la vivienda acudieron ante la Profeco, ante la misma empresa y ante los medios, poco se pudo hacer, pues lo que argumentaba la garantía de Hogares Unión y/o Conjunto Parnelli, era que la garantía únicamente cubría todo lo que ocurriera dentro de la vivienda, no en el patio, pese que a se supone que también sería parte de la misma.
Estos mismos afectados denunciaron que las siguientes etapas dentro de La Joya también se habían desarrollado encima de cenotes y hoyancos que la constructora únicamente tapó.
Más recientemente, la zona, ubicada cerca del Arco Vial, se ha visto envuelta en varios hechos de violencia, y al igual que las casetas de vigilancia de Palmas 2 en Solidaridad, tampoco hay vigilancia.
A eso hay que agregar que constantemente cambian de sede sus oficinas, rotan a su personal para que la gente no tenga con quien tratar todo lo concerniente a los problemas en viviendas y fraccionamientos, e incluso usan varias razones sociales, para poder evadir temas legales.