El Desfile Arcoiris celebrado en Auckland, Nueva Zelanda, fue interrumpido inesperadamente por un grupo denominado ManUp Flash Haka, que ejecutó una haka de protesta en el evento. Este grupo, junto con la Iglesia del Destino, expresó su descontento con lo que describen como la “agenda Woke y Arcoiris”.
El mensaje del grupo fue claro: están cansados de lo que consideran libertinaje en los desfiles y eventos relacionados con la comunidad LGBTQ+. Los manifestantes, en su mayoría jóvenes de la generación Z, se alzaron para expresar su rechazo a la celebración del desfile.
💥 Rainbow Parade Interrupted by ManUp Flash Haka 💥
Our Radical Young People have had enough!
Our ManUp Men have had enough!
Destiny Church has had enough!
The debauchery in the Rainbow Parade has gone on for too long!
Auckland has long been overrun with this Woke, Rainbow… pic.twitter.com/MIfmhYo2lc— Brian Tamaki (@BrianTamakiNZ) February 15, 2025
En una declaración llena de pasión, uno de los líderes del grupo afirmó que tanto los hombres de ManUp como los miembros de la Iglesia del Destino ya han tenido suficiente de lo que consideran la agenda Woke y Arcoiris. Criticaron a la Policía de Nueva Zelanda por su presencia y protección del desfile, acusándolos de priorizar la protección de los participantes del desfile por encima de la ley y el orden.
El grupo ManUp Flash Haka también criticó la participación de la policía en el evento, señalando que se han convertido en una broma al ondear banderas arcoiris y desfilar con coches decorados con estos colores. Además, advirtieron a las organizaciones gubernamentales y políticos que el tiempo de sus agendas Woke ha terminado y que es hora de que el Movimiento Popular se levante para poner fin a lo que consideran estupidez.
El líder del grupo instó a estas organizaciones a abandonar sus cargos antes de que sean echados, y llamó a una movilización para “hacer que Nueva Zelanda vuelva a ser grandiosa”. Esta interrupción en el desfile es solo el comienzo de lo que prometen será una serie de acciones para oponerse a la agenda Woke y Arcoiris en el país.
La interrupción del desfile generó un amplio debate en la sociedad neozelandesa. Por un lado, los defensores de la diversidad y los derechos LGBTQ+ condenaron la protesta y reafirmaron la importancia de celebrar la diversidad y el amor en todas sus formas. Por otro lado, los manifestantes y sus simpatizantes insistieron en que su protesta es legítima y necesaria para proteger lo que consideran valores tradicionales y familiares.
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Este evento subraya la profunda división en la sociedad de Nueva Zelanda respecto a temas de diversidad e inclusión. Mientras la comunidad LGBTQ+ continúa luchando por sus derechos y reconocimiento, grupos como ManUp Flash Haka se oponen firmemente, creando un escenario de conflicto y debate en el país. La policía y las autoridades locales ahora enfrentan el desafío de mantener el orden y garantizar la seguridad en futuros eventos de esta naturaleza.
Con información de El País