El peso mexicano es considerada una de las monedas con mejor desempeño durante lo que va del año y, en comparación con el euro, tiene un mejor rendimiento y ha tenido mayor fortaleza frente al dólar.
Al menos durante el primer semestre del año y hasta esta semana, el peso estaba considerado como la moneda más fuerte de América Latina. Tanto así que los expertos le llamaron el súper peso.
En cambio, el euro se fue acercando poco a poco a la paridad con el dólar, algo que no sucedía desde hace por lo menos 20 años y, el miércoles, llegó incluso a valer menos de un dólar.
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Por otra parte, la caída en los precios de las materias primas, ante el temor de una recesión mundial, ha ocasionado que las diversas divisas de América Latina se deprecien frente al dólar.
La fortaleza del peso, sin embargo, se explica por algunos factores como el buen nivel de exportaciones (petroleras y de manufacturas), récords en la recepción de las remesas que envían los migrantes a las familias y la subida en la tasa de interés del Banco de México.
En junio, el Banco de México, siguiendo la tendencia del ajuste en Estados Unidos, elevó la tasa de referencia en 75 puntos base. Un aumento histórico. Y se espera que, como parte de las medidas para combatir la inflación, el banco central vuelva a elevar la tasa en la misma medida en su próxima decisión de política monetaria.
Ante esta perspectiva, indica Monex, se instaura un clima de mayor volatilidad para el peso, frente al dólar. Y, en este sentido, el Banco de México tendrá que seguir un incremento en la tasa de referencia.
Con información de: Expansion
