Eldiara, conocida en TikTok como Barbie, una joven de 22 años que documenta su lucha contra el cáncer a través de videos, ha conmovido a miles al organizar un inusual pero significativo funeral para su brazo, amputado como consecuencia de la enfermedad. El video del evento, compartido en su cuenta con casi 500 mil seguidores, rápidamente se viralizó, generando una ola de reacciones y reflexiones sobre la resiliencia y la forma de afrontar las adversidades.
Con un vestido negro y un velo, Barbie se mostró visiblemente emocionada al inicio del video, acercándose a una mesa donde reposaba su brazo cubierto por una manta gris y sostenido por una almohada. “Mira esa cosa”, exclamó con una mezcla de asombro y melancolía al ver la parte de su cuerpo separada de ella. Con la voz entrecortada, reveló su nombre real, Eldiara, mientras contenía las lágrimas: “Este es mi brazo que está sobre la mesa ahora mismo”.
A pesar del contexto, el ambiente no estuvo exento de momentos de ligereza y camaradería. Amigos de Eldiara, también vestidos de negro, compartieron risas nerviosas y comentarios que reflejaban una mezcla de asombro y admiración por la valentía de la joven. La cámara enfocó entonces el brazo, adornado con flores y con las uñas pintadas de negro, cubierto con una manga oscura, como si aún formara parte de un cuerpo vivo.
“Siento muchas cosas al mismo tiempo”, confesó Eldiara, expresando la complejidad de emociones que la embargaban. Amigos presentes también compartieron sus impresiones: “Mi nombre es Ally y lo siento”, dijo una adolescente conmovida. “Estoy pasando el mejor momento de mi vida”, comentó otra joven, quizás refiriéndose a la fuerza de Eldiara y la unión del grupo. “Mi nombre es Sascha y esto es fascinante, mórbido, pero fascinante”, añadió otra asistente, reconociendo la peculiaridad y el profundo significado del acto.
El video ha superado las 10 millones de visualizaciones y ha generado cientos de comentarios. Un internauta incluso compartió una anécdota similar: “A un señor le amputaron la pierna y la enterró en el panteón y siempre dice: ‘Yo tengo un pie en el panteón’”. Este comentario, entre otros, resalta la necesidad humana de ritualizar las pérdidas, incluso aquellas que no son de una vida en su totalidad.
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El gesto de Eldiara trasciende la simple excentricidad. Se trata de un acto de aceptación, de cierre de un ciclo y de empoderamiento ante una situación dolorosa. Al organizar un funeral para su brazo, Barbie no solo le dice adiós a una parte de su cuerpo, sino que también reafirma su control sobre su propia narrativa y transforma una experiencia traumática en un acto de sanación y resiliencia, inspirando a miles con su valentía y originalidad. La joven ha dado una lección de cómo afrontar la adversidad con creatividad y entereza, convirtiendo su historia en un poderoso mensaje de esperanza y superación.
Con información de Milenio
