Una trabajadora del gobierno municipal de Guadalajara, Jalisco, generó una fuerte ola de indignación tras declarar públicamente que participó en el sacrificio de un perro como parte de un ritual espiritual. La funcionaria, identificada como Naomi Sofía Figueroa Álvarez, realizó la confesión durante una transmisión en vivo difundida en su cuenta de Tiktok.
En el video, Figueroa describe el hecho como un acto necesario dentro de una ceremonia religiosa vinculada a la santería, práctica de origen afrocaribeño conocida formalmente como religión orisha.
Tuve que hacer un sacrificio muy grande… le cortaron a un perro. Era para que me quitaran a mis enemigos del camino. Todos van a caer”, dijo mientras hacía un gesto con la mano en el cuello, simulando el acto.
Naomi Figueroa se desempeña actualmente como colaboradora especializada en la Dirección de Colmenas y Centros de Cuidado Comunitarios, dependencia perteneciente a la Coordinación General de Construcción de Comunidad. De acuerdo con el portal de transparencia del Ayuntamiento de Guadalajara, su alta en el cargo se registró el 18 de marzo de 2025, y su sueldo mensual bruto asciende a 18 mil 400 pesos, incluyendo prestaciones, ayudas para despensa y transporte.
La controversia también dirigió la atención a su familia, pues Naomi es hija de Susana Priscila Álvarez Hernández, exfuncionaria sancionada en 2019 por uso indebido de recursos públicos, al viajar sin autorización. Actualmente, Álvarez Hernández trabaja en el Gobierno del Estado de Jalisco y percibe un salario superior a los 50 mil pesos, según información de medios locales.
El video provocó un amplio rechazo en redes sociales, donde usuarios y colectivos en defensa de los animales han pedido la destitución inmediata de Figueroa Álvarez, así como una investigación formal por parte de las autoridades municipales.
Se llama Sofía Figueroa Álvarez. Es servidora pública en Guadalajara, Jalisco, y confesó que tuvo que matar a un perro porque practica la santería.
A través de tiktok, Sofía aseguró que lo hizo para que le quitaran a sus enemigos del camino.
Según el diario Reforma, los… pic.twitter.com/i9AtPh0u7j
— 𝙍𝙪𝙩𝙝 𝘽𝙖𝙧𝙧𝙞𝙤𝙨 𝙁𝙪𝙚𝙣𝙩𝙚𝙨 (@rbarriosfuentes) June 9, 2025
Cabe mencionar que, el Código Penal de Jalisco, en su artículo 306, establece penas que van de tres a cinco años de prisión para quienes maltraten o maten animales, además de multas económicas que pueden alcanzar los 113 mil pesos. También contempla trabajos comunitarios como parte de las sanciones.
Por su parte, la Ley de Protección y Cuidado de los Animales del Estado de Jalisco prohíbe el uso de animales en prácticas que impliquen sufrimiento o muerte, incluso si son parte de rituales religiosos. Esto significa que, pese a la justificación espiritual de la funcionaria, la acción podría ser considerada ilegal.
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El área en la que labora Figueroa tiene como misión promover el desarrollo comunitario, la inclusión y la paz social en las colonias del municipio. Su declaración pública ha sido calificada por muchos como incompatible con los valores que su cargo representa.
Hasta el momento, el Ayuntamiento de Guadalajara, encabezado por la alcaldesa Verónica Delgadillo, no ha emitido una postura oficial sobre el caso. Sin embargo, la presión en redes sociales aumenta, y ciudadanos exigen una respuesta clara y acciones contundentes.
Con información de Quinto Poder