Los habitantes del caserío de Culden, una aldea de los Andes peruanos, atacaron con fuego a medio millar de murciélagos por miedo a ser contagiados de coronavirus.

Y es que el miedo se apodera de los habitantes de Perú, ya que hasta el momento en Perú se registran 480 infectados y nueve muertos por Covid-19.

De acuerdo con el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) del país, fueron alrededor de 300 ejemplares los que murieron en el ataque y otros 200 afortunadamente pudieron ser rescatados de manos de peruanos, quienes los preparaban para sufrir el mismo final.

El rescate de estos animales sucedió gracias al personal del Serfor y del Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) para ser liberados más tarde.

El ataque fue provocado luego de que se difundiera de él rumor de que la pandemia de coronavirus se originó en China porque una persona comió sopa de murciélago.

Los residentes de la zona salieron en grupo armados con antorchas dispuestos a atacar una cueva cercana de murciélagos, pero más tarde huyeron a una escuela cercana, donde fueron quemados.

Por su parte la directora de Gestión Sostenible del Patrimonio de Fauna Silvestre, Jessica Gálvez-Durand, resaltó que entre el grupo de murciélagos había varias especies de la familia myotis, todas ellas inofensivas para el ser humano por ser insectívoras.

En tanto, la institución adscrita al Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri) de Perú precisó que el 70 por ciento de las especies existentes de murciélago en el mundo se alimentan de insectos, de los cuales muchos son nocivos para la agricultura y para la salud humana como los mosquitos transmisores del dengue y otras enfermedades.