Veterinarios convocan para que se deje de criar y de comprar perros braquicéfalos, como los Pug, el Bulldog Francés y el Bulldog.
Se trata de la Asociación Veterinaria Británica, quien ha convocado para que se deje de criar y comprar perros braquicéfalos, como los Pug, el Bulldog Francés y el Bulldog.
Con el hashtag #BreedToBreath (cría para respirar) reclaman por estos animales con caras chatas. Y es que pueden parecer adorables y tiernos pero esa apariencia no es natural y les causa serios problemas a su salud.
75% de los pugs padecen braquicefalia y sus dueños no lo saben
El problema es que la crianza selectiva ha modificado su forma física, llevándolos a ser cada vez más pequeños; su cráneo cada día es más chato, asemejando el de un humano y no el de un perro, sus hocicos cortos y cabezas redondeadas.
Esta condición de braquicefalia es lo que les provoca complicaciones respiratorias conforme van creciendo.
Asimismo, médicos veterinarios británicos encontraron que el 75% de los dueños de los perros con braquicefalia no sabían que sus mascotas pueden potencialmente desarrollar enfermedades respiratoria, oseas y anatómicas.
De hecho, algunos, incluso, consideraban “normal” el que sus perros estornudaran o jadearan constantemente.
Principales razas braquicefalias ha incrementado
Simplemente, en Reino Unido, en 2007 casi no se tenían registros de Bulldogs franceces, pero en sólo ocho años han superado los 20 mil ejemplares registrados.
Por su parte, el pug y el bulldog se encuentran acutalmente cercanas a los 10 mil ejemplares registrados, cuando en 2007 no había más de 5 mil.
Su creación en un ‘laboratorio’ con las características de las razas que querían mezclar, hasta alcanzar ese resultado, que no es natural pero que resultó saludable para el ejemplar, posteriormente resultó en una modificación insalubre.

Por ahora, el comenzar por los perros con braquicefalia es un buen inicio para entender que si se busca criar selectivamente a una especie, se necesita al menos considerar las implicaciones que eso tendrá sobre su vida, como la ausencia de la depresión fronto-nasal de los Pitbull.
Con información de Plumas Atómicas